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BID firma importantes acuerdos con Argentina, Chile, Colombia, Honduras y Uruguay

  • La presencia de los Gobernadores y socios internacionales hizo posible la materialización de 13 contratos de crédito y otros acuerdos en el marco de la reunión.

 

La reunión anual de las Asambleas de Gobernadores del BID y BID Invest, realizada en Panamá del 16 al 19 de marzo, fue el marco de la firma de acuerdos que concretan el apoyo a los países de la región. La presencia de los Gobernadores del BID y BID Invest, así como de otros socios internacionales, hizo posible estos acuerdos que permitirán el en temáticas como cambio climático y biodiversidad, productividad, desarrollo sostenible, educación y protección social, entre otros.

En el caso del operativo con el sector público, el presidente del BID Ilan Goldfajn firmó junto con los representantes de los gobiernos siete contratos de crédito para avanzar en la implementación de los proyectos aprobados recientemente por el Directorio Ejecutivo del BID, a lo que se suman tres acuerdos de BID Invest con países de la región, todos ellos con el fin de apoyar el desarrollo de América Latina y el Caribe.

En el caso de Chile, el presidente Goldfajn y el ministro de Hacienda,  , firmaron el contrato de préstamo de una línea de crédito de hasta US$1.000 millones para el país. El objetivo de la línea de crédito es aumentar la productividad y promover el desarrollo sostenible en los sectores de finanzas, acción climática e internacionalización. Con este programa la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), ejecutor, canalizará recursos para el acceso al crédito de las mipymes a través de instituciones, con foco en aquellas lideradas por mujeres o que apoyen acciones climáticas. En total, se beneficiará a más de 170.000 mipymes, además de capacitar a cerca de 8.000 personas.

Con Argentina, se firmaron tres contratos de préstamos de tres operaciones que suman un total de US$235 millones y que se destinarán al  Fortalecimiento de sus servicios de sanidad agropecuaria y sostenibilidad de sus recursos marinos: con esta operación por US$125 millones se espera mejorar la efectividad del control y prevención de plagas y enfermedades que afectan al patrimonio zoo-fitosanitario del país, incrementar la capacidad diagnóstica de los laboratorios de sanidad vegetal y animal, y reforzar la investigación sobre recursos oceanográficos, ecosistemas marinos y el litoral costero. El préstamo beneficiará a más de un millón de actores privados del sector agropecuario.

Una segunda línea de Sostenibilidad social, económica y ambiental del sector vitivinícola en Argentina por un monto de US$40 millones busca fomentar el uso de tecnologías y la capacidad de comercialización por parte de los pequeños y medianos productores, así como favorecer la participación en el sector de micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), especialmente aquellas lideradas por mujeres y jóvenes. Y, finalmente, se firmaron dos contratos para la   Mejora de la gestión integral de residuos sólidos urbanos: Uno de hasta US$300 millones y un segundo contrato de préstamo de la primera operación asociada por US$70 millones-, permiten avanzar en el financiamiento de obras y equipamientos que contribuirán a la disposición adecuada de residuos sólidos, mejorar su recuperación y valorización y mitigar los impactos negativos ambientales de los basurales a cielo abierto, con un enfoque de inclusión social. La primera operación, que cuenta con aportes adicionales del Banco Europeo de Inversiones y del presupuesto , beneficiará directamente a más de 900.000 habitantes.

En el caso de Uruguay, el BID dispondrá de un préstamo del Programa de Fortalecimiento de la Política Pública y Gestión Fiscal para la Atención de la Crisis Sanitaria y Económica que, con un monto de US$145 millones, permitirá diseñar e implementar medidas efectivas y fiscalmente responsables, promoviendo la disponibilidad y la ejecución oportuna de recursos públicos para atender la crisis. Además, la operación busca fortalecer el efecto anticíclico de la política fiscal a través de medidas temporales para la protección del ingreso de los hogares vulnerables y el incremento de la liquidez de las empresas, apoyar la provisión de bienes y servicios esenciales y promover la recuperación económica y fiscal.

Esta operación es la segunda de la serie programática en apoyo a la estrategia del Gobierno de Uruguay para enfrentar la pandemia. Uruguay fue el primer país en completar dicha serie programática en la región.