Presidente del gremio Juan José Ugarte afirmó que: “La crisis que atraviesa el sector forestal es una crisis del país”, en un cónclave que convocó a autoridades, parlamentarios, ejecutivos y gerentes de pequeñas y medianas empresas, trabajadores y representantes de comunidades.
Los diversos actores del mundo forestal chileno, desde Maule a Los Ríos, estuvo representado en Concepción en una asamblea crucial convocada por la Corporación Chilena de la Madera-Corma-, bajo el lema “Ante la crisis del sector: un llamado a la acción”, que busca alertar al país sobre las críticas dificultades que lo afectan ya por más de una década.
La actividad reunió en el Centro Español a 270 personas de la comunidad, gobernadores, alcaldes, dirigentes gremiales y sindicales, gerentes de pequeñas y grandes empresas como Arauco y Cmpc, parlamentarios, entre otros, donde se visibilizó la crisis en empleo, incendios, usurpaciones, robo de madera, atentados y las posibles soluciones y apoyos que se necesitan para su reactivación.
Allí se conoció un estudio encargado a Econsult Capital, expuesto por el economista y socio de la consultora, Gonzalo Sanhueza, quién partió señalando que el sector forestal chileno, “pilar fundamental del desarrollo económico y ambiental del país, atraviesa una crisis sin precedentes”, y reveló que la actividad económica del sector ha disminuido desde 2018, afectando directamente el empleo y la economía nacional, así como los esfuerzos para combatir el cambio climático.
De acuerdo con el informe “Reactivación del sector forestal: Propuestas para aumentar el crecimiento económico, generar empleo y alcanzar la carbono-neutralidad”, en los últimos 5 años, la actividad industrial forestal disminuyó un 3,6% anual promedio para el sector celulosa y un 7,8% anual promedio para el sector industrial de la madera, en un contexto en que la economía nacional se mantiene en expansión.
Un nuevo ciclo
El presidente del gremio, Juan José Ugarte Gurruchaga enfatizó que “la crisis que atraviesa el sector forestal es una crisis del país, que afecta al empleo en las comunas, que afecta al desarrollo en las regiones, a nuestra agenda de sostenibilidad y, por lo tanto, como país, tenemos que ir a buscar esta oportunidad. Tenemos que ser capaces de dar inicio a un nuevo ciclo forestal”.
Las 320 mil hectáreas de reducción de superficie de plantaciones durante los últimos diez años, US$3.500 millones menos de aporte al PIB en los últimos tres años por parte del sector y más de 36.000 empleos destruidos, son algunas de las cifras con que Ugarte reseñó la actual crisis del rubro.
El estudio de Econsult, reveló que el año 2022, el sector forestal representó un 1,6% del PIB nacional. A nivel regional, el sector forestal representó un 23% del PIB de la Región de Los Ríos, 21% del Ñuble, 11% del Biobío y 9% de la Araucanía. Asimismo, generó 267.500 empleos directos y 160.500 empleos indirectos.
Respecto a las exportaciones, el sector representó un 14% de las exportaciones nacionales no mineras. Y, de cada peso producido por el sector forestal genera 1,02 pesos adicionales en el resto de la economía nacional. Este multiplicador es superior al promedio del resto de las actividades económicas del país, dado que a nivel nacional cada peso producido genera 0,78 pesos adicionales en la economía.
“Estamos hablando de situaciones críticas que, para el pequeño productor y propietario, tienen un sentido de urgencia”, enfatizó Ugarte. “La crisis del sector ya supera una década y ha tenido una especial afectación por el tema de los incendios intencionales”, dijo en referencia a 1 millón 400 mil hectáreas quemadas en los últimos diez años. “Sumemos a eso $167 mil millones de pesos en robo de madera, más de 400 atentados a contratistas y 100 mil hectáreas usurpadas”.
Destacó los avances sustantivos en materia de seguridad, “con el apoyo del Senado, con la aprobación de la ley del robo de madera, ésta bajó en 92% en 18 meses, lo que es un signo muy elocuente de cara al país, de que cuando nos unimos con voluntad y compartimos un objetivo, podemos actuar, tenemos las capacidades. Podemos hacer lo mismo con la violencia rural y con una agenda de recuperación y de inicio de un nuevo ciclo forestal para Chile”.
Juan José Ugarte Gurruchaga, presidente de Corma
Encadenamientos productivos: un círculo virtuoso
En tanto, la presidenta de la Sofofa, Rosario Navarro Betteley llamó a “darle la relevancia que merece una industria que ha sido tan significativa, que genera beneficios sociales, ambientales, pero también económicos”. Explicó que existe “un trabajo colaborativo de la gran empresa, pero también del encadenamiento productivo que genera con pequeñas y medianas empresas de las regiones, lo que finalmente termina siendo un círculo virtuoso para que genere mayor bienestar a los a los pueblos de nuestro territorio”
Desde la empresa Arauco, su gerente de Personas y Sostenibilidad, Charles Kimber manifestó que “nos preocupa que el desarrollo esté solamente dándose en las empresas más grandes y que los pequeños y medianos no se desarrollen, porque eso hace que no sea sustentable un sector completo. Estamos preocupados por la sustentabilidad del sector forestal y queremos contribuir con buenas ideas”.
Innovación como oportunidad
Algunas medidas que se proponen desde Corma para revertir esta situación tienen que ver con incorporar innovación a los procesos. “Colocar mayor valor agregado con menos materia prima, conectar la agenda forestal del pequeño productor con el déficit habitacional, incorporar tecnología nueva a los aserraderos para producir las viviendas que tanto requieren nuestros vecinos y, en el largo plazo, recuperar con sentido de urgencia las 100 mil hectáreas quemadas a pequeños propietarios”, expresó Ugarte.
“Tenemos que partir por los más débiles”, afirmó el dirigente. “Tenemos que recuperar esos suelos erosionados, bosques quemados al pequeño productor que, en una noche, queda sin patrimonio, sin capacidad de crédito y no tiene ninguna posibilidad de volver a ponerse en pie”.
De acuerdo con estudio de Econsult, esta caída en la actividad forestal ha tenido un impacto real en la pobreza e ingresos de las comunas forestales. A modo de ejemplo, durante los últimos años la caída del ingreso autónomo de los hogares en comunas forestales ha sido mayor que la caída en comunas no forestales. A su vez, en los últimos 10 años se ha destruido empleo forestal en las regiones de Maule, Biobío y Ñuble, Araucanía y Los Ríos-Los Lagos.
Rodrigo Díaz, Gobernador Región del Biobío
La meta de carbono neutralidad
Chile comprometió su carbono neutralidad al 2050, lo que, entre otras medidas, incluye forestar 200.000 hectáreas y el manejo sustentable y recuperación de 200.000 hectáreas de bosque nativo a 2030, lo que contrasta la cantidad de superficie destruida por incendios en los últimos 10 años.
“Hemos planteado una meta país. Tener 1 millón de hectáreas de aquí al 2050, combinando bosque nativo y plantaciones para avanzar en una agenda social, ambiental y económica, y recuperar la capacidad de crecimiento. Si no hacemos nada, a fin de esta década, habremos retrocedido en medio millón de hectáreas”, sentenció el presidente de Corma.
Entre las propuestas de política pública de Econsult se plantea fomentar la forestación para alcanzar 1.000.000 de há de bosques adicionales a 2049, para pequeños y medianos propietarios, aumentando la captura de CO2 y reactivando el empleo.
Al fomentar la forestación de 1.000.000 há adicionales se generaría una captura de 13,9MM de tCO2e en 2050 y 11.600 nuevos empleos anuales en promedio (en periodos de plantación y de rotación). Esto permitiría alcanzar la meta de carbono neutralidad en el año 2050.
Para el financiamiento se propone la creación de un Fondo de Inversión Forestal, financiado por Corfo mediante una alianza con una entidad internacional, con una línea de crédito acumulada estimada de US$ 200 millones y la posterior venta de bonos de carbono para el refinanciamiento del Fondo de Inversión. La entidad internacional sería relevante, tanto por el financiamiento como para el apoyo necesario para la venta de los bonos de carbono.
Finalmente, para el funcionamiento del mecanismo de financiamiento se propone crear una entidad nacional que colabore con los pequeños propietarios forestales para conseguir la certificación y venta de sus bonos de carbono.
