Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, detalló ayudas al agro tras incendios e inundaciones y aseguró que precio del huevo bajará a fin de año.
El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela van Treek, formó parte de la delegación presidencial que visitó la Región del Biobío la semana pasada, y realizó un balance de las ayudas estatales pro agro para enfrentar temas coyunturales, como incendios e inundaciones, y también para abordar temas de fondo como la escasez hídrica en el marco de la crisis climática global.
Y anunció a www.trade-news.cl buenas noticias, ya que Chile está muy cerca de ser declarado libre de influenza aviar y, también aseguró que precio del huevo tendrá fuerte caída en el último trimestre de 2023.
-¿Cuál es su balance de su reciente visita a la Región del Biobío?
-Hemos avanzado históricamente rápido en la entrega de bonos de riego para que los agricultores de Santa Juana recuperen sus sistemas de irrigación tras los incendios de la última temporada.
También hemos entregado 21 sacos de alimento a cada pequeño agricultor de Alto Biobío para sus animales que se vieron afectados por las últimas inundaciones. En la región llegan a un número de 1.500 personas.
Asimismo, estuvimos en la provincia de Arauco en una reunión de trabajo junto al delegado Humberto Toro, buscando un acuerdo estratégico entre los distintos municipios, las comunidades mapuche y mi cartera, de modo de potenciar la activación de la agricultura que se ha venido dando a partir de un mayor precio que ha tenido la papa, tema de interés ciudadano, y tal como hemos logrado mayor producción de trigo, maíz y arroz que ha permitido bajar los precios y estabilizarlos. Pero la papa ha tenido alrededor de un 20% de menor producción, por lo que se está desarrollando un pilotaje entre el Inia y los productores de Cañete en busca de aumentar la producción. La idea es poner más recursos en este esfuerzo.
Y en San Pedro de la Paz estuvimos con agentes privados, el Infor y el ministro de Energía, Diego Pardow, para fortalecer una alianza con el sector privado y tener mayor oferta de pellet para las estufas dado la implementación de planes de descontaminación en la zona centro sur, de manera de no repetir los déficit visto en inviernos pasados. La idea es apuntalar esta industria.
-¿Cuáles son los montos de inversión involucrados en estos propósitos?
-Hay $1.300 millones en proyectos específicos para recuperación de suelos, canales y bocatomas dañados por las inundaciones, y forman parte de $20.000 millones que como Comisión Nacional de Riego y Riego Indap son destinadas a las regiones más dañadas, que son en orden de daño O´Higgins, Maule y Ñuble. Seguido por Biobío y Valparaíso, donde hubo puntos específicos afectados, como es el caso acá de la zona de Laja, Mulchén, por ejemplo.
Respecto al apoyo a campesinos por incendios, son $600 millones que se han destinado a la zona, y en el caso de alimentación animal, sólo en Alto Biobío, la inversión alcanzó los $550 millones, llegando con la ayuda en mayo, es decir, antes de las nevazones, evitando así trámites burocráticos que hacían que el apoyo llegara tarde a las comunidades pehuenches.
-¿Cómo se está trabajando para enfrentar la escasez hídrica?
-Destaco el presupuesto de la CNR y Riego Indap que llega a los $150.000 millones.
Segundo, se acaba de aprobar la nueva Ley de Riego tras una década sin poder llegar a acuerdos. Fuimos capaces de articular un esfuerzo que pone el foco en la conducción, que ayude a todos los usuarios de un territorio y eleva los aportes a la agricultura familiar campesina, que tenía un tope de 400UF y ahora se eleva a 1.000UF, de manera que puedan ser más competitivos los proyectos, las constructoras que se dedican a esto creen interés en romper las brechas con los agricultores que van creciendo, como 17 agricultores y agricultoras de Santa Juana que eran pequeños muy productivos. Se busca allí mejorar la competitividad y asegurar que estén los productos en los mercados regionales.
Globalmente, además, hay un plan de embalse, y se está activando proyectos en Ñuble, con los embalses Zapallar y Punilla. En este último, se han presentado varias ofertas en la licitación en curso.
-¿Cómo ha ido avanzando el trabajo post incendios forestales de la última temporada y cuáles son las lecciones aprendidas?
-Primero decir que el cambio climático como factor obliga a tomar medidas de adaptación. Están sucediendo cosas para los negacionistas como los 48 grados en el norte de Italia y nosotros nunca habíamos tenido, desde que se mide un frente de mal tiempo, que la isoterma comience recién a los 3.000 metros, siendo lo común los 1.800 metros, por tanto todo este problema que tuvimos con aluvión de barro que se llevó nieve almacenada del año pasado…o sea son eventos extremos que no habían acontecido. Entonces, primero está esto, la volatilidad y crisis climática, lo que obliga a la descarbonización de la matriz eléctrica. Los segundo, está claro que hay que generar obras estructurales en cursos de ciertos ríos de manera de que tengan mejores defensas tras los desbordamientos recientes. Y urge hacer ordenamiento territorial y pedir el apoyo de los municipios para alertar la construcción de viviendas dentro de los lechos de los ríos. Se debe velar porque no haya ocupación en zonas de riesgo, fiscalizando e implementando planes de ordenamiento territorial.
-Hay buenas noticias en el último informe Odepa respecto a baja de precios en productos esenciales, como el huevo.
-La gran crisis del huevo se debió al aumento del precio del maíz, que subió de $180 el kilo a $360 durante el segundo semestre de 2022 e inicios de 2023. Esa es la gran razón de la quiebra de empresas, con casos puntuales como Florida, donde la industria fue afectada fuertemente por la gripe aviar que felizmente ya pronto estaremos en condiciones de declararnos país libre de gripe aviar. En este punto, el SAG es muy estricto en comprobar que se cumplan dos meses sin ningún caso en la industria (pollo broiler, pavo y gallinas ponedoras, más la pequeña agricultura), y este nueve de agosto próximo alcanzaríamos sesenta días sin ningún caso, lo que otorga el estándar de país libre de influenza aviar. Ahora bien, hay que recordar que en noviembre y diciembre, vuelven las aves migratorias del hemisferio norte con posibles vectores de la gripe aviar. Pero al día de hoy, la situación es notable.
El INE contabilizó más de 260 mil gallinas nuevas que ingresaron a los distintos planteles, y además, por razones de genética, a partir del 21 de septiembre, las gallinas comienzan a poner muchísimo más. Esto, sumado al precio del maíz a $200/k, tenemos la certeza que habrá una baja importante del precio del huevo en el último trimestre de este año.
-¿Estamos mejor preparados ante un nuevo brote?
-Primero quiero hacer un reconocimiento a la empresa Ariztía que no ha tenido ningún caso, y que es una de las dos grandes empresas de producción de aves. También recordar que hubo sólo cuatro casos asociados a la industria de pollo y pavo, de parte de Agrosuper.
Y en el caso de gallinas ponedoras de huevo, tuvimos cinco casos: en Maule, Linares y los tres casos de Florida. Acabamos de abrir fondos concursables para las empresas que se vieron afectadas con la producción de huevos, que se les exige mejorar estándares de seguridad para aspirar a aportes directos por monto total de $170 millones, combinado con crédito Banco Estado con tasa preferencial y garantía estatal. Entonces parte de las lecciones es que en algunos casos hay que superar brechas de vigilancia y de bioseguridad.
