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SII llama a Mipymes a solicitar el subsidio al sueldo mínimo

Beneficio se entregará hasta abril de 2025, pero advierten que es una medida paliativa.

Ya se encuentra disponible el subsidio al sueldo mínimo para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes), , personas jurídicas sin fines de lucro (fundaciones) y comunidades que apoya el pago del sueldo mínimo establecido en la Ley 21.578, beneficio al que se puede acceder hasta abril de 2025.

Pueden solicitarlo todas las Mipymes que cumplan con las condiciones y debe hacerse por una sola vez. El plazo para la solicitud en la plataforma habilitada por el Servicio de Impuestos Internos () es de 90 días. El pago se realizará hasta 15 días después de aceptada la solicitud del beneficio. Los siguientes meses, se depositará automáticamente hasta el último día hábil del mes.

 

¿Quiénes pueden acceder?

Desde el SII informaron que las Mipymes que tengan inicio de actividad en Primera Categoría antes del 8 de mayo de 2013, como persona natural o jurídica, incluidas las cooperativas.

O que sus ventas y servicios del giro deben ser superiores a 0,01 UF e iguales o inferiores a 100.000 UF en 2022.

También pueden recibirlo quienes tengan uno o más trabajadores con sueldo mínimo o con ingreso imponible entre 411.000 y 500.000, de acuerdo al periodo contemplado en la ley.

Además, están dentro de los beneficiarios la persona jurídica sin fines de lucro y comunidades constituidas hasta el 8 de mayo de 2023.

 

¿Quiénes no pueden acceder?

Las Empresas Individuales de Responsabilidad Limitada (Eirl) en que el dueño sea el único trabajador o Sociedad por Aciones (SpA) en que uno de los accionistas sea el único trabajador.

Tampoco las empresas qe tengan inicio de actividad posterior al 8 de mayo de 2023 y en la que un socio o accionista sea persona jurídica.

No recibirán el subsidio además aquellas entidades que tengan código de actividad financiera y de seguros.

El presidente de la Biobío, Álvaro Ananías, reconoció que es una buena noticia para el segmento Mipyme, pero recordó que es una medida paliativa, ya que tras un periodo, se vuelve a la normalidad del valor sin subsidio.

¿Qué pasa en aquellos casos en que la empresa no logró pasar ese periodo de acomodamiento?, se preguntó el representante el empresariado en la Región del Biobío.

“Creemos que un subsidio al sueldo mínimo debe ir acompañado del crecimiento y desarrollo de este segmento, de modo que se pueda sostener en forma estable. Sino lo único que estamos haciendo es propiciar cierres o a trabajar en informalidad, es decir, no trabajar en términos formales el pago del sueldo mínimo, lo cual es muy malo para la economía”.

Ananías destacó que el sueldo mínimo es una variable que afecta mucho a las Mipymes que son intensivas en mano de obra y, además, a un sector relevante para la economía local como lo es la agricultura.

“Es ahí donde vemos problemas. Es importante ayudar a este segmento que hoy están muy complicados”.

En la misma línea, la académica de Ingeniería Comercial de la , Daniela Catalán, estimó que existe la posibilidad de que, si las empresas no logran adaptarse a los nuevos cambios en términos de costos, este incremento solo retrase el inevitable aumento del desempleo. 

“Esta medida, si bien constituye una ayuda, podría no ser totalmente efectiva en el largo plazo”. 

 

Eficiencia: la clave para las Mipymes 

En un escenario donde no hay un crecimiento económico sólido y los costos están en aumento, las empresas se enfrentan a obstáculos para mantener su rentabilidad. La incertidumbre también complica la planificación a largo plazo y dificulta la toma de decisiones estratégicas, explicó Daniela Catalán.

“En este contexto, lograr la eficiencia se convierte en una prioridad para las empresas. Esto implica optimizar los procesos internos, reducir gastos innecesarios, buscar alternativas más económicas y mejorar la productividad. Es necesario realizar ajustes y adaptaciones en la estructura de costos, evaluando cuidadosamente cada partida y buscando que minimicen el impacto en la rentabilidad”.


Productividad en juego

Para el economista del Observatorio de Corbiobío, Ariel Yévenes, el tema en este tipo de medidas dice relación con las postergaciones que se evidencian en el mercado para mejorar las brechas de productividad laboral. 

“En efecto, si las empresas terminan demandando crecientemente subsidios para cubrir costos laborales, lo que en realidad está ocurriendo es que hay un problema de competitividad y productividad muy limitada, que no propician que las empresas se autosostengan. Por tanto, es clave mirar estas medidas de manera muy coyuntural y con enfoque de muy corto plazo, pues se hace insostenible proyectar estas medidas en el largo aliento”.