Humberto Borges
Expertos analizaron por dónde debería ir el proyecto que el gobierno presentará este año para financiar su programa.
Una vez rechazados los dos retiros, el de algunos diputados y el del gobierno, ahora el foco es la reforma tributaria, que busca recaudar recursos para financiar el plan de gobierno.
Pero ¿hacia dónde debe apuntar esta iniciativa? Para Humberto Borges, director del Diplomado en Gestión Tributaria y académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Alberto Hurtado, el proyecto no se encuentra bien enfocado, pues tiene metas muy altas. “Por eso enfocarse en la evasión y ampliar la base y tasa de la renta de los altos ingresos es correcto”, según apreció.
Ahora, lo que en sí fue enfático es que la prioridad es la ilusión y evasión, pero las exenciones son difíciles de eliminar, ya que las más grandes se encuentran en las rentas presuntas de la industria transporte y agricultura.
Recalcó que la elusión es de 5,5% del PIB aproximadamente. “Mucho es referente al IVA, pero hay un espacio que no se mide y es lo referido a los negocios informales”, apuntó,
Pero, además, notó que “el sector de evasión más grande es el comercio. Ha disminuido por la boleta y factura electrónica. Sin embargo, creo que sí, es muy importante una reforma, pero muy bien realizada e ir directo a las rentas altas, evasión y exenciones. Los impuestos a las empresas son altos en referencia a la Ocde, pero es porque parte de ello es crédito a los dueños de las empresas”, subrayó.
FALTA FISCALIZACIÓN
Patricio Gana, director de AK Contadore
Por su parte, Patricio Gana, director de AK Contadores, contador de la Universidad de Santiago y con un postítulo en Legislación Tributaria y un Diplomado en IFRS, Legal Publishing de la misma Casa de Estudios, añadió que en Chile hay evasión tributaria y en el sector comercio hay bastante al igual que en la agricultura.
“En general, en el resto de las empresas que prestan servicios B2b la evasión es baja. Pero en las B2c hay más. También hay mucho comercio electrónico que no está pagando impuestos y ahí falta fiscalización. Tal vez el Servicio de Impuestos Internos sabe que se realizan esas ventas, porque llega la información a través de medios electrónicos, sin embargo, como esas personas no tienen sus inicios de actividades, no son fiscalizadas. Y ahí hay evasiones que pueden resultar importantes”, estimó.
Sumó que, en general, el comercio informal, sobre todo en situación de crisis económica, tiende a aumentar. Entonces, lo lógico, sería pensar en una disminución de tasas de impuesto, pero en la mayor fiscalización y sanciones que apunten a evitar la evasión o elusión tributaria.
Por otra parte, el experto indicó que, en el país, los impuestos a las empresas son altos. “Cada país tiene situaciones diferentes, pero en Chile tenemos que atender nuestra propia realidad. Y yo creo que está bien que grandes empresas o trasnacionales tengan tasas de impuesto que son más altas. Pero también, creo que debemos apuntar a tasas un poco más bajas cuando no se trata de ese tipo de contribuyentes”, consideró.
AYUDARÍA
Incluso, cree que se podría cobrar un pequeño impuesto patrimonial a cantidades de dinero que se encuentren reinvertidas. “Es decir, a modo de ejemplo: usted invierte, perfecto, no paga impuesto a la renta por esa reinversión, pero yo le cobro un porcentaje anual por el tiempo que esas utilidades permanezcan ahí. Podría ser un 0,1%, puede ser una cantidad muy mínima, que de todas maneras ayudaría a la recaudación fiscal”, planteó.
Explicó que los impuestos patrimoniales son complejos y a veces son difíciles de aplicar y controlar, pero de esta forma, sería bastante más fácil su aplicación. “Lo importante es no descontrolarnos como país y mantenerlo en un tono técnico, porque si lo transformamos en un tema político, ya pasa a ser un problema y si se descontrola, la verdad es que nos puede hacer un gran daño. Los impuestos patrimoniales pueden ser muy peligrosos para un país”, cerró.
