Sin embargo, en junio hubo descenso de 8,8%, lo que alerta a la industria. Alza de dólar e inflación afectan.
Un alza acumulada de 25,2% respecto al 2021 mostraron las ventas de vehículos livianos y medianos en la Región del Biobío, que se tradujeron en la salida a las calles de 14.493 unidades, pese a que en junio se registró un descenso de 8,8%, con 2.470 autos, camionetas o SUV comercializadas, según el informe de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (Anac).
De acuerdo al reporte, en los primeros seis meses del año cerró con 222.453 unidades a nivel nacional, registrando un crecimiento de 24,4% con respecto al mismo período de 2021, es decir, menor a lo concretado en el Biobío.
Por su parte, durante el sexto mes finalizó con la comercialización de 36.206 unidades, esto es, un incremento de 2% con respecto al mismo mes del año anterior.
Al analizar el mercado por regiones, la Metropolitana (8,6%), Maule (6,4%) y Coquimbo (2,7%) son las con mayor crecimiento durante junio, al compararlas con el mismo período del año anterior.
Estos resultados se explican, en gran medida, por el sostenido auge en diversos emprendimientos y actividades ligadas a los servicios que utilizan el vehículo como principal herramienta de trabajo. Esto ha llevado a que el factor de uso del transporte aumente en los últimos meses, pues la versatilidad (en especial en modelos SUV y camionetas pick-up) es uno de los aspectos más apreciados por los compradores.
Meses débiles
Para Julio Cartagena, gerente de Ventas de Sergio Escobar, los efectos de alta demanda se están nivelando y las brechas serán más apretadas, ya que las bases comparativas del primer semestre venían de meses débiles por la pandemia y ya en el segundo semestre del 2021 explotó la venta y eso, con lo que viene, va a mostrar, probablemente, un crecimiento estancado, pero de volúmenes igual importantes.
Sobre si en la caída de junio ha impactado el alza del dólar y la inflación en las ventas, dijo que siempre influye, ya hay una nueva realidad y el país no va a volver a ser lo que era antes. “Los precios han subido y debemos readecuar nuestros presupuestos. Esto mismo hace que lo pensemos 2 veces antes de tomar decisiones de compra y combinado que oferta de entrega limitada, para algunas marcas y modelos, pero que se ha ido resolviendo”, hizo ver.
Por lo mismo, apreció que se viene un segundo semestre mucho más competitivo en que los temas logísticos de transporte naviero y terrestre, se están superando y eso agiliza los procesos y aumenta la disponibilidad de autos a la venta. Con esto se mantiene las proyecciones de ventas de 400 mil a nivel país.
A su vez, Cristian Muñoz, académico de la carrera de Ingeniería Comercial de la Universidad del Bío Bío, afirmó que se aprecia un debilitamiento en la industria automotriz, pero es una señal clara que el auge del consumo que se ha vivido en los últimos tiempos comienza a bajar, lo que tiene que ver con un descenso en la demanda, lo cual es coherente con las proyecciones de una eventual recesión el próximo año.
“El Banco Central, con las alzas que ha venido aplicando en la tasa de política monetaria, apunta a disminuir el consumo para reducir los precios. Por eso, la baja en la compra de vehículos es una señal que la economía se está enfriando”, indicó el ex seremi de Hacienda.
Sobre el alza del dólar y la inflación, cree que el alza en el costo de la vida está haciendo mella en el interés por la adquisición de vehículos. Además, el tipo de cambio, factor relevante en la importación, ha variados un 12,5% respecto al primer día hábil de este año y el IPC acumulado lleva un 6,1% en 2022. “Por ende, ambos factores afectarán el valor final para las personas que compren un transporte”, destacó.
Diluirse
Andrés Cooper, gerente general de Chileautos, señaló que todas las señales indican que se trata del inicio de un descenso en el sector, que afectará a la industria automotriz. “Muchos de los factores que el año pasado habían inducido a una mayor demanda por autos, ya comienzan a diluirse y con ello, comienza a haber un mayor stock de unidades usadas y también nuevas, por lo que el exceso de demanda comienza a bajar y por ende las ventas comenzarán a moderarse”, agregó.
Agregó que alza del dólar los altos IPC son parte de los factores que sin duda han influid. El incremento de la divisa deriva en precios más altos para los autos, que ya estaban a valores fuertes respecto a los meses anteriores, producto de la escasez de unidades, de la falta de piezas y de la demanda aún inusual, y la inflación seguirá encareciendo aún más las nuevas unidades que ingreses con este tipo de cambio.
“Coincidimos con las proyecciones oficiales de Anac y Cavem de terminar el año con menos de 400.000 unidades nuevas y menos del millón de autos usados. El cambio de tendencia ya se siente en ambos mercados y no vemos señales que lo tiendan a aminorar”, cerró.