• Enap Refinería Biobío, Hidronor y AES Andes son las empresas a las que la entidad fiscalizadora ha iniciado procesos sancionatorios.
• En tanto, recibieron 473 denuncias, un número “altísimo” explicó el organismo lo que se debió al debut del nuevo Portal de Denuncia Ciudadana online.
Javier Ochoa Provoste
Tres cargos graves ha formulado la Superintendencia del Medio Ambiente en la Región del Biobío durante 2022: se trata de tres procesos sancionatorios iniciados contra Enap Refinería Biobío, Hidronor y AES Andes, en un año que ya suma ocho procedimientos a junio, versus diez de todo 2021.
Así lo dio a conocer a TradeNews el encargado regional de la SMA, Juan Pablo Granzow, quien informó que en materia de fiscalización, el año pasado hicieron 37 fiscalizaciones programadas en el marco de las Resoluciones de Calificación Ambiental (RCA).
“Recibimos 473 denuncias, un número altísimo porque debutó el nuevo Portal de Denuncia Ciudadana online. Este tipo de denuncias, en general, están asociadas a Ruido, elusión del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, posibles incumplimientos
A la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), mal manejo de residuos y emisiones, entre otras tipologías. En algunos casos, cuando no correspondían a la SMA, se derivaron a los organismos públicos con competencia ambiental”.
Granzow puntualizó que en materia sancionatoria se iniciaron diez casos el 2021 y este año, al 1 de junio, ya llevan ocho sancionatorios, lo cual muestra un avance importante respecto al año anterior.
“Hay un desfase entre que se realiza la fiscalización y se levanta un sancionatorio, porque hay que construir casos jurídicamente robustos, con un análisis exhaustivo de antecedentes porque hay que considerar también que ellos la empresa infractora o un denunciante, siempre puede recurrir a los Tribunales Ambientales en contra de nuestras actuaciones”.
Los tres cargos graves
Destaca como cargo grave el levantado contra Enap Refinería Biobío por no efectuar el reemplazo de la antorcha L-1360, de acuerdo con lo comprometido en la RCA, y también un cargo leve por no reportar la frecuencia de monitoreo exigida en su Programa de Monitoreo mensual en los meses de marzo a diciembre de 2019, en marzo de 2020 y en noviembre de 2021. Por este caso la empresa ya presentó sus descargos, tras lo cual sigue el análisis sancionatorio.
El segundo caso corresponde a los cargos formulados contra el proyecto eólico Mesamávida de AES Andes (ex Aes Gener), tras denuncias ciudadanas por ruidos. Los cargos son dos: uno grave, y que consiste en la ejecución deficiente de medidas para no intervenir a las comunidades aledañas en la etapa de construcción del proyecto, lo que se manifiesta en la implementación extemporánea de las medidas de mejoramiento de caminos y no dar cumplimiento al horario de ejecución de obras dispuesto en la RCA. En tanto, el segundo cargo fue clasificado como leve dice relación con no identificar a todos los receptores más cercanos a las principales obras de la primera fase de construcción del proyecto, en el área de aerogeneradores N°7, N°8 y la subestación eléctrica.
El tercer caso es el del Relleno Copiulemu (Hidronor). Acá se formularon tres cargos, uno grave por inadecuado manejo de lixiviados, al no contar con mecanismos de control, contención y supervisión necesarios, lo que llevó a la contingencia de derrame de fecha 22 y 23 de febrero de 2021, de al menos 300 m3 de lixiviados no tratados en el Estero Chaimávida (Curapalihue), provocando efectos adversos en la calidad de las aguas y en la fauna íctica del sector.
Más dos leves que son no contar con mecanismos de contención suficientes que permitan asegurar el correcto manejo y envío oportuno a la planta de tratamiento de osmosis inversa, de los lixiviados y las aguas lluvias con contacto que caen sobre el área del depósito, generando la contingencia de fecha 24 de junio de 2019.
Y no reportar la frecuencia de monitoreo exigida en su programa de monitoreo.
En este caso, la empresa presentó un Programa de Cumplimiento (PdC), que es un plan de acciones y metas que busca hacerse cargo de los incumplimientos en un plazo determinado por la SMA. La institución se encuentra actualmente revisándolo.
¿Cuáles son los desafíos hoy de la SMA?
El encargado regional de la Superintendencia del Medio Ambiente, Juan Pablo Granzow, sostuvo que, entre los desafíos para este año, está la fiscalización de proyectos con RCA, “ya sea revisando sus compromisos ambientales, como también denuncias que los vecinos nos hacenllegar. En ese sentido, destaco la fiscalización de parques eólicos, humedales urbanos, loteos en áreas protegidas, los cuales muchas veces abordamos como requerimientos de ingreso al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). En muchos de esos casos hay denuncias ciudadanas, pero en otros tenemos denuncias de servicios públicos que nos hacen llegar la información, por ejemplo, sobre el tema de loteos, nos envía información Conaf.
En el caso de denuncias ciudadanas en general, Granzow dijo que el tema de los ruidos molestos, sin duda sigue ocupando la agenda y concentra el 50% de los casos a nivel general. Ahí la fiscalización apunta a básicamente pubs, discoteques y construcciones.