Mujeres y Hombres: Talento tenemos todos…

Por Alejandra Valdés, directora Ejecutiva de la Corporación Cultural de Lo Barnechea

No me encantan todas las artistas de este tema del Día de la Mujer. Tengo mis conflictos internos con esta necesidad por momentos “desbocada” de relevar a la mujer como algo que estuvo siempre hundido, pisado, maltratado y abusado… Mi formación de historiadora me arrastra a intentar medir cada etapa de la historia con su propia “huincha” y no generalizar para temas particulares de diversos períodos.

Me gusta pensar este día desde la identidad y el valor particular de cada mujer y cada hombre, con sus respectivas virtudes y falencias, con sus riquezas y defectos. Y prefiero pensar en la complementariedad más que en la competencia.

Si bien en los tiempos que corren e históricamente, ha habido significativas diferencias en los temas laborales, sociales y económicos, en el trato de las mujeres y su valoración,  no es menos cierto que la historia está llena también de mujeres inteligentes, intrépidas, cultas y también insumisas que han cambiado el curso de los más diversos acontecimientos. ”Desde las mujeres espartanas hasta las medievales, pasando por las mártires cristianas, la mujer ha sido siempre tan protagonista como el hombre de todas las tragedias y victorias de la Humanidad”, señaló Álvaro Fernández Texeira en marzo de 2022 en el diario La Mañana de Uruguay. Y Régine Pernaud, (1909-1998), autora de ensayos históricos como La mujer en el tiempo de las catedrales, descorre el velo mostrando la riqueza aportada por la Edad Media a la cultura occidental, a través de mujeres.

Su biografía de Leonor de Aquitania, muestra como ella en sus dos reinados llevó a la corte elegancia, sofisticación y por sobre todo conocimiento de las artes y de una vida con  intelectuales de primer orden. 

Y es que nuestra sociedad más allá de menospreciar a la mujer, asignó roles demasiado diferenciados a hombres y mujeres. Ahí entonces, la etiqueta de las mujeres quedó en lo doméstico, la crianza, la familia, la enseñanza, las labores de beneficencia y la dependencia de los hombres. Pero ello no es carencia de talentos ni mucho menos de creatividad, pues ¡cuán discurridas han sido tantas mujeres para vivir y salir adelante en la cotidianeidad! 

Todos lamentamos hoy el caso de María Anna Walburga Ignatia Mozart, también conocida como Nannerl​, la hermana mayor de Mozart. Desde temprana edad destacó por sus habilidades en el piano, el clavecín y el canto. Su padre la educó y la llevó a Viena y París para mostrar sus dotes, pero apenas cumplió 18 años fue obligada a permanecer en casa con su madre, tras haber alcanzado la edad de contraer matrimonio. A diferencia de su célebre hermano, Nannerl no pudo continuar con una carrera musical prometedora.

En Chile tenemos un ejemplo parecido con las hermanas Magdalena y Aurora Mira. Ambas nacieron en Santiago a mediados del siglo XIX, con cuatro años de diferencia. Desde pequeñas recibieron una completa educación artística a cargo de preceptores y profesores tanto nacionales como extranjeros. Al crecer, las hermanas destacaron por la gran calidad y propuesta de sus cuadros: Aurora se enfocó en la pintura de flores, frutas, bodegones y paisajes, mientras que Magdalena hizo lo propio con los retratos. Llegaron a ser consideradas como las primeras mujeres chilenas en dedicarse a las bellas artes y fueron galardonadas por la crítica especializada debido a su trabajo, pero sus carreras fueron detenidas de forma abrupta cuando se casaron. Desde ese momento, la sociedad les impuso otras prioridades y sólo pintaron dentro de su círculo más íntimo. 

El desafío de la igualdad de derechos y oportunidades para hombres y mujeres sigue vigente en Chile en muchos ámbitos, entre ellos también en las artes y la cultura. Es tiempo de relevar a tantas mujeres virtuosas y es tiempo de que trabajemos para que todos podamos  compatibilizar nuestros universos: el arte, la cultura, el trabajo, el deporte, la vida al aire libre y la pasión personal, con la familia y la vida doméstica, y que ello sea reconocido equitativamente.

Estamos convencidos de que el talento está en todas partes y hoy lo más importante son las oportunidades para desarrollarlo y el debido reconocimiento.