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Paula Quiñones, académica Vinculación con el Medio de Ingeniería Comercial USS
Este próximo fin de semana viviremos nuevamente el día de los patrimonios en Chile. Esta fecha se celebra en todo el país y es una instancia para que la familia salga a recorrer y disfrutar de las riquezas del territorio. Es una excelente oportunidad para conocer el variado patrimonio cultural y natural que el país y la región del Biobío tienen. Esta fecha ha logrado consolidarse y ser cada vez más reconocida, gracias al trabajo colaborativo de varios actores, entre ellos, municipios, instituciones públicas, organizaciones sociales, instituciones educacionales, empresas turísticas, solo por nombrar algunos, que se han esforzado por ofrecer instancias entretenidas y de aprendizaje.
A la fecha, sólo en nuestra región, ya hay más de 170 actividades programadas y casi todas sus comunas ofrecen alternativas para disfrutar, idealmente en familia, tales como recorridos pedestres por parques, muestras interactivas en museos, talleres prácticos, expresiones artísticas, gastronomía local, conocimiento de importantes y novedosas actividades universitarias, entre otras. La riqueza de nuestro patrimonio regional se debe, en gran parte, a su capital cultural e histórico y diversidad geográfica. Eso lo hace más atractivo pues en un mismo fin de semana podríamos disfrutar de actividades tanto en la cordillera como cerca del mar.
El día de los patrimonios nos permite reencontrarnos con nuestras raíces y fortalecer nuestra identidad, es por ello que es importante aprovechar estas actividades gratuitas, no solo para sacar fotos para los recuerdos sino para aumentar nuestro propio capital social y cultural. Pero no sólo es importante apropiarse de nuestro patrimonio cultural. En efecto, existen otras razones a considerar: es importante y clave que nuestros niños y jóvenes asuman y contribuyan a la preservación de la identidad cultural de los pueblos y comunidades.
Entender que el patrimonio cultural forma parte fundamental de la identidad de una sociedad nos ayuda a mantener vivas nuestras tradiciones y nuestra memoria colectiva. Es a través de él que podemos comprender nuestro pasado, conectarnos con nuestra herencia cultural y proyectar nuestro futuro. Cuidar nuestro patrimonio cultural implica reconocer y valorar nuestra propia identidad como chilenos.
Hoy más que nunca necesitamos proteger y difundir nuestro patrimonio, pero hay que partir por casa, es por eso, que los dejamos invitados a recorrer la región del Biobío, a apropiarse de nuestra historia y ser futuros anfitriones del territorio.