En el trimestre móvil febrero-abril de 2023 el desempleo llegó a 7,6%, cifra que aumentó 0,1 puntos porcentuales en doce meses.
Un crecimiento de 2,6%, equivalente a 17.072 personas más, registraron los ocupados en la Región del Biobío en el trimestre febrero-abril 2023, comparado con igual periodo de 2022.
Según informó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) los sectores que más incidieron en el ascenso de las personas ocupadas fueron minería (147,6%) y otras actividades de servicios (33,6%). Por su parte, los asalariados informales (35,6%) y trabajadores por cuenta propia (4,3%) fueron las categorías que más influyeron en el aumento de las personas ocupadas.
El informe del INE precisa, en línea con lo anterior, que la tasa de ocupación informal se situó en 27,8%, registrando un incremento de 3,7 puntos porcentuales en doce meses.
Los datos ubican al Biobío como la segunda región en el país que más creció, en doce meses en ocupación informal, registrando un 18,2%, muy por encima del promedio país de 2,6%, generando un punto de inflexión entre el empleo formal y el informal, de acuerdo a lo informado por el INE.
Las cifras que no son muy buenas noticias, según señalan expertos locales.
El organismo remarcó que en el trimestre móvil febrero-abril de 2023, el desempleo llegó a 7,6%, cifra que aumentó 0,1 puntos porcentuales en doce meses, explicado por la mayor alza de la fuerza de trabajo (2,7%), en comparación a la presentada por las personas ocupadas (2,6%).
Las personas desocupadas aumentaron 4,8% en la comparación interanual, lo que significó 2.597 personas más en esta condición.
Crece el deterioro
Carlos Smith, economista del Centro de Estudios de Economía y Negocios de la FEN de la Universidad del Desarrollo, indicó que sin duda los números están mostrando un aumento en el deterioro del empleo.
Sostuvo que la informalidad ha sido algo que ha sustentado hace ya bastante tiempo la cifra de empleo, pero está aumentando una fuente laboral de mala calidad desde el punto de la protección social, lo cual no es una buena noticia.
“Una buena noticia para la economía debería ser la creación de empleo formal y para eso tenemos que hacer que la economía crezca más. La gente sale por distintos motivos de la fuerza laboral y busca estos empleos, por ejemplo, que no cotizan para su jubilación. La receta es el crecimiento. Además, necesitamos aumentar la producción y de esa manera también generar mayor cantidad de empleos formales. Pensemos solamente en un dato: la ley que aumenta el sueldo mínimo en el quintil de menores ingresos en la sociedad, solo el 13% tiene empleo formal, por lo que ese incremento le llegará a muy pocos.
“El mercado laboral ha sido bastante resiliente, pero debería empezar a mostrar los efectos de la contracción económica. Ahora, el guarismo es menor a lo esperado, sin embargo, los efectos tienen que empezar a notarse, sobre todo porque la cantidad de personas que entra a mercado laboral es actualmente más grande”, analizó.
Mientras que el Observatorio de Corbiobío, recalcó que en la línea de la informalidad, el alto número explica que se mantenga la tasa de desempleo regional en el 7,6%, cuya proyección sigue siendo al alza en los próximos meses.
Al respecto, los economistas Francisco Gatica y Cristian Muñoz indicaron que es prioritario distinguir entre la informalidad permanente y transitoria, de manera de reorientar mejor las políticas públicas con foco en la realidad comunal y provincial.
“El informe también plantea que es necesario disponer de información clave para los inversionistas, para generar empresas que reactiven el empleo y se genere un clima pro-inversión. Por lo mismo, formulamos un llamado al Gobierno a definir un Plan Estratégico que establezca desafíos económicos y sociales, que sea convocante de los diversos sectores productivos”, remarcaron.
Por su parte, Arturo Claro, economista de Econsult, afirmó que nuevamente se crean empleos mes a mes en términos desestacionalizados, lo que implica que en el margen la cantidad de ocupados se continúa recuperando.
“En meses pasados esta recuperación estuvo marcada por la creación de empleos públicos, pero ahora está siendo caracterizada por la creación de empleos por cuenta propia (informales), mientras que los asalariados privados (formales) ya cumplen 3 meses cayendo”, advirtió.
Agregó finalmente que, para recuperar la tasa de ocupación pre-pandemia, aún quedan 490 mil empleos, por eso no resulta extraño que continúe aumentando la cantidad de ocupados. Por otro lado, la caída del empleo asalariado privado es consistente con un mercado laboral débil en donde las empresas demandan cada vez menos trabajos: los avisos laborales en internet acumulan una caída de 46% anual y los despidos por necesidades de las empresas continúan aumentando. Así, en las variaciones anuales, el empleo asalariado privado continúa perdiendo terreno principalmente a costa del empleo por cuenta propia.