La Federación de Trabajadores de Plantas Pesqueras de Consumo Humano de la Región del Biobío (Festrach) manifestó, tras las aprobaciones ocurridas este martes en el Congreso Nacional, sobre el fraccionamiento de merluza, que con ello “se pone en gravísimo riesgo la fuente laboral de nuestras compañeras en la región del Biobío, pues se aprobó el fraccionamiento del recurso destinando un 70% para la pesca artesanal y 30% para la pesca industrial”.
“La medida atenta contra los empleos formales de las 800 mujeres que laboran en la única planta de proceso de Biobío, PacificBlu, todas ellas jefas de hogar”, precisaron a través de una Declaración Pública.
Asimismo, lamentaron que la diputada por el Distrito 20 de la Región del Biobío, Candelaria Acevedo, “haya votado en favor de esta medida, atentando contra el empleo de cientos de mujeres de su región”, cierra la Declaración.
TRABAJOS DE CALIDAD
La directiva de la Festrach, se había reunido en estos días con el Subsecretario de Pesca y Acuicultura, Julio Salas, para plantear su inquietud y preocupación por los efectos que puede tener en el empleo dentro del sector pesquero industrial el nuevo fraccionamiento planteado por el Ejecutivo y, muy en específico, la demanda del sector artesanal de un 50% de la pesquería del jurel.
Esto, en marco de la discusión legislativa que se realiza en la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados.
“Estamos defendiendo los puestos de trabajo de calidad de nuestros compañeros de las plantas de consumo humano, y estamos atentos a que los nuevos porcentajes de fraccionamiento no terminen en nuevas perdidas de empleo en la Región del Biobío”, asegura Raúl Morales, presidente de la Federación.
Raúl Morales, presidente de la Federación de Trabajadores de Plantas Pesqueras de Consumo Humano de la Región del Biobío (Festrach)
Avances Legislativos en la Comisión de Pesca
Al respecto, el 10 de septiembre recién pasado, la Comisión de Pesca, Acuicultura e Intereses Marítimos aprobó en general, por 11 votos a favor y uno en contra, el proyecto (boletín 17.096) que fija un nuevo fraccionamiento entre el sector pesquero artesanal e industrial.
El texto propone el citado fraccionamiento, de carácter permanente, para las cuotas globales de captura de las pesquerías. Para estos efectos, la participación de cada sector se determinará considerando los desembarques reales realizados, en consideración a antecedentes científicos y registrales.
PELIGRO REAL
Por otra parte, define una regulación respecto de los aumentos de cuota global de captura del recurso jurel, derivados de decisiones de administración de la Organización Regional de Ordenación Pesquera del Pacífico Sur.
El secretario general de Festrach, Pedro Rodríguez, manifiesta que el 85% planteado por el ejecutivo para la industria no representa una merma importante en el sector, dado que antes tenían el 90% de la cuota.
Pedro Rodríguez, secretario general de la Federación de Trabajadores de Plantas Pesqueras de Consumo Humano de la Región del Biobío (Festrach)
Consecuencias Potenciales para las Plantas de Biobío
Sin embargo, “Los artesanales quieren el 50% de jurel y merluza, además del 100% de la sardina. Esto sí representaría un peligro real para las plantas de consumo humano de Biobío, pues con la disminución de la cuota deberíamos cerrar plantas, y ello conllevaría cesantía para la región, que ya ha estado fuertemente afectado por el cierre de Huachipato”, aseveró.
Cabe recordar que desde agosto de 2019, la pesca industrial no puede participar de la captura de la jibia, tras la promulgación de una ley de iniciativa parlamentaria que excluyó al sector y generó el inmediato cierre de tres plantas de proceso ubicadas en Talcahuano (2) y Lota (1), con la consecuente pérdida de unos 900 empleos directos y otros 800 indirectos, además de cuatro pesqueros de alta mar que dejaron de operar con sus respectivas tripulaciones.
