Por Diego Mora, Head of Research de XTB Latam
En los últimos días, hemos visto cómo Nvidia Corp es ahora la segunda empresa más valiosa del mundo, convirtiéndose en la primera empresa de chips informáticos en alcanzar los US$3 billones de capitalización bursátil, de acuerdo con Bloomberg. Ahora, el fabricante de chips está solo por detrás de Microsoft Corp. por valor de mercado, tras superar a Apple.
Sus acciones se han revalorizado un 147% este año, sumando cerca de US$1,8 billones, a medida que se dispara la demanda de sus chips por cuenta de la avalancha masiva de gasto en inteligencia artificial. Aunque la escala y el ritmo del ascenso de la compañía han generado cierta cautela e incluso escepticismo, hasta ahora ha demostrado que los detractores están equivocados.
Se espera que los ingresos netos de Nvidia se disparen hasta los US$65.000 millones, de media, en el actual ejercicio fiscal desde los US$30.000 millones del año anterior, según las estimaciones recopiladas por Bloomberg. Esas previsiones han aumentado un 10% sólo en el último mes, por lo que para Wall Street es solo cuestión de tiempo antes de que Nvidia se quede con el primer lugar.
Lo anterior deja entrever que sin duda el mercado bursátil actual está experimentando un auge de la IA. Las empresas que incorporaron «IA» en sus presentaciones de resultados y comunicados de prensa durante la temporada de resultados en curso han tendido a superar en cambios de precio de las acciones a aquellas que no mencionaron la IA en absoluto. Esto destaca el persistente interés de los inversores en la IA. A veces, esto puede llevar a reacciones exageradas a las noticias relacionadas con la IA.
El nuevo Chat GPT-4º, por ejemplo, es un caso que parece encajar perfectamente en esta tendencia. La herramienta en sí es impresionante, pero representa una evolución más que una revolución en el panorama de la IA. Empuja los límites de lo que antes se consideraba imposible, pero es difícil etiquetarlo como un paso completamente nuevo y revolucionario, especialmente cuando se compara con las capacidades de otros modelos.
¿Qué se puede esperar del fenómeno Nvidia? Sirve como prueba del inmenso potencial que aún reside en la IA y la carrera tecnológica en curso. Sin embargo, es difícil anticipar que será el catalizador que impulse a las empresas tecnológicas a nuevos niveles de valoración. En este contexto, vale la pena prestar atención a los últimos desarrollos de Apple en IA. Aunque Apple aún no ha anunciado su propia solución de IA, hay rumores sobre posibles acuerdos entre la compañía y Microsoft para utilizar OpenAI en nuevos iPhones, así como posibles discusiones con Alphabet. Si estos rumores se materializan y Apple efectivamente se asocia con OpenAI y utiliza las características ofrecidas por Chat GPT-4º, podría ser un hito significativo en el mundo de los teléfonos inteligentes y dispositivos electrónicos.
Sea como sea, Nvidia ha demostrado en estos días que los límites de las capacidades de la IA se están empujando constantemente, lo cual sugiere que estamos solo en las primeras etapas del desarrollo de la IA generativa.