Se trata de una planta piloto de jugo de fruta ubicada en el Liceo Bicentenario Polivalente de San Nicolás. La iniciativa se constituye como una alternativa para la comercialización de la uva País, fruta de bajo retorno económico para los productores.
Producir a escala piloto jugo de uva, envasarlo y etiquetarlo para validar el producto a escala pre-comercial es uno de los objetivos del proyecto “Implementación de Planta Piloto para la Obtención de Jugo de Fruta en la comuna de San Nicolás”, también denominado VIDITATA.
La iniciativa, desarrollada por el Centro de Investigación de Polímeros Avanzados (CIPA) y financiado por el Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional de Ñuble, también permite aprovechar los residuos de poda de las vides para elaborar nuevos productos como extractos de sarmiento y hojas.
Hace unos días, autoridades visitaron las instalaciones donde se lleva a cabo el proceso, con el fin de revisar las principales ventajas del programa, instancia donde además se comprometieron a buscar un terreno para su implementación definitiva.
Actualmente, la planta piloto está instalada en el Liceo Bicentenario Polivalente de Excelencia de San Nicolás, donde científicos e investigadores de CIPA trabajan para la producción, envasado y etiquetado del jugo de uva VIDITATA.
HERRAMIENTA ESTRATÉGICA
En la visita, Jorge Romero, Jefe de la división de Fomento e Industria del Gobierno Regional de Ñuble, explicó la importancia del proyecto para las comunas del Valle del Itata, en especial San Nicolás.
“Es una herramienta estratégica para la diversificación de los productos que se generan a partir de cepas de uva patrimoniales”, y agregó que “el poder trabajar bajo el alero de un programa FIC y con apoyo de CIPA desarrollando este jugo de uva, con valores nutricionales mayores de los que hoy se comercializan, va a ayudar a la economía viñatera que está pasando por días difíciles”. Lo anterior, debido al bajo precio con que las grandes empresas están comprando la uva País.
Mientras que, el alcalde de San Nicolás, Víctor Hugo Rice, además de compartir con los investigadores y escuchar sobre los resultados del proyecto, propuso el traslado de esta planta a una ubicación definitiva. El lugar propuesto es colindante con el gimnasio del liceo, lo que tiene una doble ventaja: fácil acceso a los servicios básicos y, por su cercanía con el establecimiento educacional, permitirá que niños y jóvenes puedan continuar capacitándose en los procesos que se llevan a cabo en ella.
“Estamos muy contentos, porque este proyecto se visualiza como una de las soluciones para los viñateros, no solamente de San Nicolás, de la Región de Ñuble completa. Seguiremos avanzando para lograr que se instale de forma definitiva, porque es una esperanza para solucionar el problema de nuestros productores locales, que es que el precio de la uva País no corresponde al valor del trabajo que realizan nuestros vecinos”, dijo el jefe comunal.
ESTUDIANTES COMPROMETIDOS
El proyecto cuyo componente principal es un extractor multipropósito que opera con vapor para la extracción del jugo de fruta y con solvente para la extracción hidroalcohólica de compuestos bioactivos, a partir de residuos de biomasa vegetal, tiene como beneficiaros directos a viticultores; y a estudiantes y docentes del Liceo Bicentenario de Excelencia de San Nicolás, quienes han sido capacitados por personal CIPA en la operación de la planta.
Al respecto, el director del Liceo, Víctor Reyes, comentó que, “este es un tremendo proyecto para nosotros, porque vincula la educación con el mundo productivo, sobre todo porque el liceo atiende a los hijos de los campesinos y viticultores no sólo de San Nicolás, sino que también de Ninhue, Portezuelo, y borde interior costero. El rescatar esta actividad agrícola rentabilizándola de mano del liceo y junto a CIPA genera conocimientos y expectativas para todas las familias del Valle del Itata”.
Del mismo modo, Saddys Rodríguez, investigadora de CIPA, explicó que, “ya llevamos un año y cinco meses de ejecución del proyecto. En San Nicolás instalamos la planta para producir lotes comerciales y realizar un estudio pre comercial del jugo de uva envasado”. La Dra. Rodríguez enfatizó que este proyecto, que comenzó con financiamiento ANID, a través del concurso de fortalecimiento de centros regionales mediante proyectos de I+D ciencia – territorio; y, en esta etapa, tiene un carácter social, buscando reactivar y apoyar la economía y competitividad de las comunas en donde se desarrollan estas iniciativas.
Finalmente, la investigadora, destacó que: “los viticultores de San Nicolás siempre apoyaron la iniciativa, y es a ellos a los que se les transferirá la tecnología desarrollada por CIPA. Nuestro objetivo primordial es que este proyecto sea útil para las y los habitantes y productores locales, ya que el vino no es el único producto que se puede derivar de la uva País”.