Profesionales y más de 500 trabajadores permanentes de la empresa presentaron un recurso de protección por vulneraciones que han sufrido en sus derechos fundamentales al trabajo e integridad física, tras más de 50 días de bloqueo ilegal que mantienen los trabajadores portuarios eventuales.
Profesionales, ejecutivos y trabajadores permanentes de Puerto Coronel solicitaron, a través de un recurso de protección interpuesto en la Corte de Apelaciones de Concepción, que se apliquen las medidas necesarias para el desbloqueo del terminal, para asegurar el respeto a sus derechos constitucionales de libertad de trabajo y el derecho de la vida e integridad física de todas las personas.
Los colaboradores del terminal piden que se tomen medidas para poder destrabar el bloqueo ilegal que mantienen un grupo de dirigentes y trabajadores eventuales en los accesos del terminal hace más de 50 días y que impiden poder retomar las operaciones del puerto con seguridad.
Los mismos señalan que se han visto amedrentados en su integridad física toda vez que fueron “violentamente agredidos, amenazados e interceptados por los recurridos y miembros de las organizaciones a quienes representan (el 2 y 8 de mayo)”, detalla el recurso.
“Entre dichas agresiones, se han registrado apedreos a buses, amenazas directas e insultos, siendo los hechos más graves y violentos, como se ha dicho, aquellos que ocurrieron los días 2 y 8 de mayo de 2024”, agregan en el recurso.
El escrito además enfatiza que “el Puerto de Coronel se encuentra literalmente paralizado a raíz del bloqueo coordinado y organizado por los recurridos, lo que impacta directamente a los trabajadores permanentes y personal administrativo en representación, quienes se encuentran impedidos de poder desarrollar su trabajo”.
Agrega que existe carga en el puerto dispuesta para su despacho que no ha podido ser embarcada y naves sin poder recalar, derivadas a otros puertos del país, con los consecuentes costos e inconvenientes logísticos.
“Se ha perdido más de un millón de toneladas de diversas especies que no han podidos ser despachadas, lo que involucra a 27 naves de diversas especies (contenedores, carga general y graneles). Además, existen embarques de frutas frescas provenientes de otros países que no han podido ser recibidos, despachos de productos que se van degradando que tampoco han podido ser embarcados en buques para su zarpe, todos procesos en los cuales intervienen los trabajadores permanentes”, enfatiza el documento.
En atención a lo anterior, los trabajadores solicitaron a la Corte de Apelaciones de Concepción que mientras se tramita el recurso presentado, se decrete una Orden de No Innovar, “consistente en que se adopten todas las medidas de policía necesarias para inmediatamente desbloquear los accesos del recinto portuario del Puerto de Coronel, así como despejar todo obstáculo interior o exterior que impida el acceso de sus trabajadores y la operación segura del referido puerto”.
Junto con oficiarse a Carabineros de Chile se solicita “la remoción de todo obstáculo que impida el ingreso, salida y operación segura, facultando a los efectivos policiales para hacer ingreso al recinto portuario, resguardar sus accesos y/o desalojar a todo ocupante en que impida su libre operación”.
EMPRESAS CONTRATISTAS
La acción de los trabajadores permanentes de Puerto Coronel se suma a la declaración realizada por un grupo de más de 30 empresas contratistas del terminal, las cuales representan a 343 trabajadores y sus respectivas familias. Entre las empresas se encuentran Jasei, Corci, Serviciociv, Reyser, Newen, Opacis, Hilfe, UVR, NEUMAQ, Anveg, Jung Chile, entre otras.
Las empresas manifestaron que era “imperativo que los trabajadores que han bloqueado el acceso a las instalaciones cesen inmediatamente y permitan el retorno a las operaciones normales del Puerto”. Asimismo, que rechazaban “cualquier forma de amenaza o intimidación hacia aquellos que deseen ingresar y trabajar en el terminal portuario”.
Las empresas afectadas agregaron que, durante este período, “nuestras empresas han sufrido pérdidas financieras sustanciales debido a la interrupción de proyectos y contratos, así como a los costos adicionales asociados con el mantenimiento de maquinaria y pertenencias dentro de las instalaciones del puerto. Situación que nos hace parte involucrada y afectada. Además, somos testigos de los malos tratos que de manera permanente sufren colegas y colaboradores de parte de los trabajadores portuarios”.