Actores públicos y privados hacen llamado al diálogo, pero las posiciones de las partes parecen irreconciliables en el corto plazo.
Sin luces de solución se mantiene la paralización de los trabajadores del Puerto Coronel que ya lleva más de un mes afectando de manera importante a la economía regional y de la macrozona, según afirman desde diversos sectores.
“La empresa quiere romper el sindicato”, sentenció el presidente del Sindicato N°1 de los Trabajadores Eventuales de Puerto Coronel, Raúl Cabeza Cares. “Todo empezó cuando ellos comenzaron con su nueva política de alcohol y drogas y quisieron hacer ver que los trabajadores estábamos en contra de eso y no es así, estábamos en contra de la forma en que la empezaron a aplicar, sin ninguna comunicación previa” y agrega que tienen antecedentes de colegas que dieron positivo en los exámenes impuestos por la empresa, que luego realizaron estas pruebas en servicios externos y resultaron negativos.
La delegación presidencial regional convocó una mesa de diálogo el pasado viernes 26, tras la cual la empresa publicó un comunicado afirmando que, a un mes de haber comenzado la paralización y a pesar del diálogo permanente con los dirigentes, no ha sido posible retomar la normalidad operativa del puerto porque los trabajadores continúan bloqueando el puerto.
Sin embargo, según asegura Cabeza, “nunca hemos sido nosotros los que no queremos trabajar. El viernes tuvimos una esperanza de llegar a un acuerdo, pero la empresa nos ha estado haciendo cada vez más exigencias. Es como si quisieran que siguiéramos parados”.
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GESTIONES DE NIVEL NACIONAL
Desde la Asociación de Exportadores y Manufacturas (Asexma) Biobío, su gerente general Alfredo Meneses Olave advirtió que “las estimaciones que se manejan en torno a esta paralización señalan pérdidas aproximadas de 1 millón de dólares diarios, lo que evidentemente tiene impacto económico, pero también en las personas y en el empleo. No hay que olvidar que esta actividad lo que hace es trasladar mercancías y productos que vienen de otras empresas, entonces, al no llegar a esos productos a destino, los compromisos comerciales se ven fuertemente afectados, con la correspondiente pérdida desde el punto de vista de esas exportaciones”.
Por otro lado, agregó, “también tenemos las importaciones de productos que ingresan al mercado y que son necesarias tanto para la producción como para el comercio, por lo tanto, las pérdidas no sólo son económicas, sino que también podemos ver puestos de trabajo en peligro”.
Meneses, quien también preside la Mesa de Comercio Exterior del Biobío (Mesa Comex), puntualizó que “esperamos que las autoridades redoblen todos los esfuerzos tendientes a generar espacio en el cual las partes vuelvan a sentarse, que ambos entiendan que este conflicto no solo les afecta en su relación organizacional, sino que también tiene un efecto expansivo muy grande. Ya vimos que la delegada presidencial ha estado haciendo ingentes esfuerzos al respecto y quizás también sería bueno ir sumando a otras autoridades del nivel central que permitan este acercamiento en un conflicto que se está alargando en demasía y cuyas consecuencias son bastante complejas”.
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TENDER PUENTES
En tanto, el secretario regional ministerial de Economía Fomento y Turismo en el Biobío, Javier Sepúlveda detalló que “de acuerdo a las cifras del Servicio Nacional de Aduanas del Ministerio de Hacienda, donde el último mes reportado con estadísticas es marzo del año 2024, y, en comparación con igual mes del año anterior, se observa un aumento del 5% en las exportaciones que salieron por el puerto de Coronel y una disminución del 45% en las importaciones que entraron por ese puerto”.
A la luz de lo anterior, “efectivamente hay un impacto en la economía regional, la que nosotros hemos venido indicando de forma muy preliminar de acuerdo a algunas aproximaciones. Sin embargo, el dato concreto, el dato real de ese impacto económico se sabrá una vez que el Servicio Nacional de Aduanas que depende del Ministerio de Hacienda, publique las estadísticas correspondientes a abril”, precisó la autoridad regional.
El personero reconoció respecto de las medidas que el gobierno está impulsando que «no hemos participado en la gestión del conflicto, ya que es un conflicto entre privados donde el gobierno, a través del Ministerio del Trabajo y del Ministerio de Transportes, ha creado los puentes para que el diálogo sea fluido y para alcanzar un acuerdo lo más pronto posible».
Sepúlveda añadió finalmente que el llamado es a ambas partes. Se busca generar el mayor diálogo posible y poner el interés colectivo por sobre el individual. Esto es crucial, ya que existen cientos de micro, pequeñas y medianas empresas afectadas por este problema. Además, hay cientos de puestos de trabajo cuyos ingresos dependen de las operaciones portuarias. A la fecha, no ven una luz al final de este camino”, cerró.
Al cierre de esta edición, Puerto Coronel no había proporcionado información a Trade-news.cl.
