La crisis amenaza con desplomar el sustento de más de 20 mil trabajadores y sus familias, mientras las autoridades exigen medidas drásticas para evitar una catástrofe económica y social.
La noticia del inminente cierre de la Siderúrgica Huachipato ha sacudido los cimientos de la Región del Biobío, llevando a alcaldes y representantes sindicales a una reunión de emergencia con el gobernador regional, Rodrigo Díaz Wörner.
La crisis amenaza con desplomar el sustento de más de 20 mil trabajadores y sus familias, mientras las autoridades exigen medidas drásticas para evitar una catástrofe económica y social.
Díaz calificó la situación de «muy grave», instando a la Comisión Antidistorsiones a incrementar las salvaguardias más allá del 25% para asegurar la supervivencia de la compañía. «La región se encuentra en Estado de Alerta. La situación es crítica y necesitamos acciones inmediatas para poder proteger el empleo», declaró en un tono sombrío.
En un gesto simbólico de duelo, alcaldes de la región se congregaron frente al edificio gubernamental, izando banderas negras en señal de luto por una empresa que durante más de siete décadas ha sido pilar de la identidad industrial local y nacional. «El cierre afectará el comercio, las casas de estudio, afectará el futuro de muchas familias», enfatizó Díaz, destacando el impacto de $70 millones de dólares anuales en sueldos que se perderían en la economía local.
Alvaro Ortiz, alcalde de Concepción y presidente de la Asociación de Municipalidades de la Región del Biobío, expresó el apoyo unánime de los ediles a los trabajadores de Huachipato y anunció la redacción de una declaración conjunta en contra del cierre. «Queremos pedirle al Gobierno que haga un nuevo esfuerzo, que haga el esfuerzo que se han hecho en otros casos con otras empresas», dijo Ortiz, haciendo hincapié en la distancia geográfica y política que separa a la región de las esferas de decisión en Santiago.
Henry Campos, alcalde de Talcahuano, subrayó la necesidad de aplicar «medidas correctivas del libre mercado» para contrarrestar prácticas desleales como el dumping, que han impedido a Huachipato competir a nivel internacional. «Lo que hemos pedido es que se apliquen las medidas correctivas que implican precisamente una competencia leal», afirmó Campos.
El presidente del Sindicato 1 de Huachipato, Héctor Medina, agradeció la convocatoria y extendió una invitación a la asamblea programada para el día 28, destacando la solidaridad de las autoridades locales pese a la tristeza que conlleva el izado de banderas negras.
Finalmente, los jefes comunales afirmaron que esperan sostener pronto una reunión con el presidente de la República, Gabriel Boric.