- Mientras, crece demanda por créditos bancarios.
Un total de $1.451.782 gastan en promedio al mes los hogares de las capitales regionales de Chile, mientras que la mitad de los hogares destina como máximo 1,1 millones de pesos mensuales o menos para cubrir sus gastos. Esto, según la IX Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) que el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) efectuó entre octubre de 2021 y septiembre de 2022, período en el que se encuestó un total de 15.134 hogares de 79 comunas de las 16 regiones del país.
Del monto promedio, el principal gasto (21,2% del total, correspondiente a $307.947) se utiliza en la compra de alimentación y bebidas no alcohólicas, porcentaje que supera al que reflejó la anterior versión de la encuesta (realizada entre julio de 2016 y junio de 2017), que fue de 19,2%.
Tras el ítem alimentación, los hogares gastan mayoritariamente su presupuesto en vivienda, electricidad, agua, gas y otros combustibles (16% del total gastado); transporte (15%); salud (7,9%); información y comunicaciones (6,7%); servicios de restaurantes y alojamiento (6,1%); muebles, equipamiento para el hogar y mantenimiento rutinario de la vivienda (6,1%).
Respecto a la anterior EPF, destacan, además del alza en alimentación, el aumento en el porcentaje del monto que los hogares destinan a vivienda (14,5% a 16%) y a seguros y servicios financieros (3,5% a 4,5%), junto con el descenso en los porcentajes de gastos dirigidos a servicios de educación (6,5% a 4,0%); recreación, deportes y cultura (5,3% a 4,4%), y vestuario y calzado (3,5% a 2,8%).
Demanda de hogares por crédito se fortalece
Según indican los resultados de la Encuesta de Créditos Bancarios del Banco Central de Chile (BCCh) al tercer trimestre de 2023, los estándares de otorgamiento de crédito para la cartera de consumo moderan sus restricciones, dado que la fracción de bancos que reporta condiciones más estrictas disminuyó de 33 a 0% respecto del trimestre anterior.
En cuanto a la demanda de los hogares, ésta se fortalece en el segmento de consumo respecto al trimestre anterior al disminuir desde 25 a 17% la fracción de bancos que reportó una demanda más baja y al aumentar desde 8 a 33% la de aquellos que perciben un fortalecimiento.
El docente de la Facultad de Economía y Negocios UDD, Francisco Labarca, dijo que las cifras de gasto de los hogares permiten visualizar el impacto que ha tenido la inflación en los últimos años.
“En términos de demanda de los hogares el ingreso que tienen las familias se han dirigido a elementos de primera necesidad, como lo son alimentos y viviendas. Dichas cifras son el espejo de la realidad que tienen las empresas hoy en día, en donde podemos observar que las industrias donde los productos no son de primera necesidad se ven enfrentados a una menor demanda por parte de las personas. Esto obedece en gran parte al debilitamiento del crecimiento económico, junto con el encarecimiento del crédito ha llevado a muchas personas a redistribuir hacia donde distribuyen su gasto”.
En cuanto a los créditos bancarios, Labarca dijo que se ve que la banca luego de varios meses restringiendo el acceso al crédito ha empezado a bajar las restricciones para el acceso al crédito, lo cual sin duda dejo un efecto en el consumo de las personas en ámbitos distintos a vivienda y alimentación en los que se mostró una menor proporción del total de gasto.
“Sin duda, si no mejoran las expectativas respecto a la evolución de le economía y continúan las restricciones de la banca, tendremos un consumo mucho más restringido, lo que tendrá un efecto mayor en la economía, lo que generará un ciclo negativo de menor consumo, menores ventas y menores empleos”.
Las claves a atender, concluyó, son básicamente las que van a determinar el ciclo del consumo de las personas: “mercado laboral fuerte, acceso al crédito o financiamiento, de esa manera podrán consumir, así las empresas pueden crecer, pagar sueldos y así continuar el ciclo económico. Las variables a tener en cuenta los próximos meses son tasas de interés, acceso a crédito y la evolución del mercado laboral”.
La académica de Ingeniería Comercial de la USS, Daniela Catalán, coincidió en que la tendencia de consumo de hogares guarda una estrecha relación con el reciente incremento de los precios en el país. Como resultado, explicó, gran parte del ingreso disponible de los hogares se concentra en la adquisición de productos esenciales, situación que ha generado que las familias sean especialmente susceptibles a las variaciones de precios en el corto plazo.
“Por lo tanto, el comportamiento de las familias es coherente con la dirección y la dinámica de la economía. Si las cifras no muestran mejoras y las condiciones tanto internacionales como nacionales continúan afectando los precios de los bienes esenciales, nos encontraremos en una situación problemática para el presupuesto de los hogares”.
Sobre la proyección, Daniela Catalán sostuvo que es crucial destacar que la falta de elasticidad en respuesta a cambios en los precios de los bienes esenciales es un factor determinante.
“Esto significa que los hogares seguirán incurriendo en gastos significativos mientras los precios no se estabilicen, lo que puede desencadenar problemas en nuestra economía. Es importante recordar que el consumo desempeña un papel fundamental en el crecimiento económico. Un menor ingreso disponible indudablemente repercute negativamente en el nivel de consumo”.