Ingrese sus palabras clave de búsqueda y presione Entrar.

Mejorar uso de pabellones reduciría en 40% lista de espera de cirugías en el Biobío

Se propone que la dependencia y decisiones de administración generales de la red de prestadores pasen a una entidad pública de altas capacidades técnicas, independiente del gobierno de turno”.

 “Habilitar los quirófanos faltantes en el Biobío, y elevar su uso al nivel de la referencia internacional (que es del 83%), permitiría aumentar en más de 13 mil cirugías adicionales al año. Esto equivale a reducir cerca del 40% de la lista de espera regional”.

Así lo precisó Raúl Aguilar, investigador senior del Instituto de Políticas Públicas en de la Universidad San Sebastián, Ipsuss, quien, junto a José Guzmán y Carolina Velasco, realizaron un estudio a partir de la siguiente pregunta: “¿Cómo se usan los pabellones quirúrgicos en la región del Biobío?”.

El investigador contextualiza que en promedio el 14% de los pabellones existentes en Chile no está habilitado, por falta de personal o de equipamiento, o bien se subutiliza su empleo. “Las causas son múltiples, pero puede ser baja capacidad para programar, pobre calidad de datos, desconocimiento de indicadores y de información en general, y suspensiones evitables de cirugías, entre otros”.

“Como Ipsuss quisimos estimar si existen holguras para aumentar la productividad de los pabellones quirúrgicos, esto a raíz del grave problema que presenta nuestro país por los extensos tiempos de espera para una cirugía”, afirmó Aguilar. “Como institución académica, tenemos que cumplir con el rol de profundizar y analizar los problemas complejos, además de compararlos con la evidencia internacional, ello con el objetivo contribuir a mejorar las políticas públicas y de entregar argumentos técnicos útiles a los directores de servicios de salud al momento de tomar decisiones, contribuyendo al mejor uso de los recursos públicos”, agregó.

La información fue dada a conocer en un encuentro realizado en dependencias de la USS Concepción (campus Las Tres Pascualas), en presencia de directores de servicios, centros de salud, representantes de servicios públicos, privados y profesionales de la institución académica.

Región del Biobío

Raúl Aguilar explicó que lo más complejo es la baja tasa de uso de algunos pabellones. “A nivel país, el 14 % de los pabellones no está habilitado. Se declaran, supuestamente están en stock, pero por las razones que sea (falta de profesionales, de equipamiento, de insumos o problemas de infraestructura), no están todos en funcionamiento”, aseveró el investigador especialista en economía de la salud.

Uno de los factores claves para aumentar el uso de los pabellones es evitar la suspensión de las cirugías. En el Biobío “nueve de cada diez suspensiones son evitables. La tasa de suspensión no es alta, pero se puede reducir mediante una mejor prequirúrgica”, advirtió el investigador.

Dentro de las extensas recomendaciones contenidas en el informe del Ipsuss, destaca un cambio estructural mayor, “separando del Ministerio de Salud la función de prestación ejercida actualmente por la Subsecretaría de Redes Asistenciales. Se propone que la dependencia y decisiones de administración generales de la red de prestadores pasen a una entidad pública de altas capacidades técnicas, independiente del gobierno de turno”, dijo Raúl Aguilar. “Los prestadores públicos de salud que dependan de esta nueva institucionalidad deben poseer atribuciones para tomar las decisiones descentralizadas sobre su personal, recursos financieros y mecanismos de administración. De esta forma podrán responder a las necesidades de sus pacientes y a la realidad local”, agregó.

Medidas

A modo de incentivo, el profesional señaló que se puede recurrir a medidas como la creación de un indicador de habilitación y/o de proporción de tiempo de uso de pabellones en la evaluación de desempeño, o utilizar mecanismos de pago a equipos directivos y personal que consideren el desempeño esperado en los indicadores de uso y habilitación de pabellones.

“Somos nosotros los llamados a dar respuestas a lo que la Región requiere. La solución debiese surgir desde el Biobío”, manifestó Jaime Sepúlveda, vicedecano de la Facultad de Medicina y Ciencia de la USS, quien propuso crear un equipo de trabajo integrado por quienes lideran la salud en la región. “Este es un tema que impacta a toda la población. Por ahora, está este estudio y habrá que buscar soluciones, generar un piloto, crear un instrumento que pueda apoyar y retroalimentar este desafío”, agregó Claudio Concha, vicerrector de la USS Concepción.

Impacto

“Debemos considerar que los pabellones han aumentado su correcta implementación y uso, especialmente en el Biobío. No obstante, queda mucho por mejorar, y este estudio nos indica eficiencias para continuar e ineficiencias a superar”, opinó Pedro Martínez, director del Hospital de Lota.

“Aquí vemos un consolidado, y la realidad de cada uno de los servicios es diversa. Si embargo, todos los datos que a nosotros nos permita hacer más eficiente el uso de pabellones es tremendamente importante, pudiendo incluso recurrir a áreas como la ingeniería, la tecnología, todo con tal de lograr real uso eficiente de la capacidad instalada en salud”, manifestó la Dra. Patricia Sánchez, directora del Hospital Las Higueras de Talcahuano.

“Como Sanatorio Alemán este tema nos impacta directamente”, dijo el Dr. Osvaldo Gaete, director médico de ese centro de salud. “Debemos tener presente que, como institución, el 50 por ciento de nuestros pacientes son públicos, por lo tanto, igual desde nuestra realidad de servicio privado podemos colaborar en mejorar el sistema, haciéndolo más eficiente”, acotó.

“Desde el IPSUSS hemos impulsado una línea de aplicada en materia de en los prestadores asistenciales, con el objetivo de aportar información relevante y oportuna para la toma de decisiones al interior de los servicios de salud, de que impacte de positivamente en la atención de pacientes, lo que en definitiva es nuestra inspiración”, puntualizó Ernesto San Martín, coordinador Ejecutivo de Ipsuss Concepción.