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“Las medidas de conservación, la orientación científica en la toma de decisiones y un enfoque precautorio en vigencia cada año muestran que el país pesquero transita en el camino correcto”, dijeron desde el gremio que agrupa a las principales empresas de la zona centro sur de Chile.
En una permanente y auspiciosa fuente de buenas noticias para el sector pesquero industrial del Biobío y los recursos marinos sobre los cuales trabaja, se ha transformado desde hace ya algunos años el informe “Estado de Situación de Pesquerías” que prepara la Subsecretaría de Pesca (Subpesca), dependiente del Ministerio de Economía.
En base al reporte entregado hace unas semanas por la Subpesca, los pescadores industriales informaron que el 75% de las pesquerías de la macrozona centro sur de Chile, en las que tiene participación la Pesca Industrial del Biobío, ya sea a través de la captura o el procesamiento de estos recursos, se encuentran sanos.
La presidenta de la Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes) que agrupa a Blumar, Camanchaca, FoodCorp, Landes y PacificBlu, Macarena Cepeda Godoy, dijo al respecto que el informe de la autoridad pesquera chilena “nuevamente arroja buenas noticias para los recursos pesqueros de esta parte del país, porque la gran mayoría se encuentran saludables y otros muestran signos esperanzadores de recuperación”.
Según el análisis de la entidad, además, del total de pesquerías evaluadas en las que tiene participación la pesca industrial a nivel nacional, el informe 2022 señala que el 59% se encuentran saludables.
La jefa de Sustentabilidad de la Asipes, Monserrat Jamett Leiva, sostuvo que “las medidas de conservación, la orientación científica en la toma de decisiones y un enfoque precautorio en vigencia, cada año muestran que el país pesquero transita en el camino correcto, asegurando la recuperación de los recursos y su proyección en beneficio de la seguridad alimentaria y sustentabilidad futura”.
Para Macarena Cepeda la mejor noticia ha sido el crecimiento sostenible de la cuota de jurel, donde Chile se ha transformado en el país con la mayor asignación a nivel mundial, gracias a su manejo sostenible y responsable. Explicó que, durante 2022, la flota industrial “jurelera” del Biobío capturó 498 mil toneladas de jurel, de las cuales el 88% (438 mil toneladas) se destinaron a elaborar alimentos, lo que se tradujo en 312 mil toneladas de productos congelados y 42 mil toneladas de conservas. Y de la producción total de conservas, el 60% se destinó al mercado local; es decir, quedaron en Chile para el consumo interno 25.200 toneladas de conservas, lo que equivale a 2.470.588 cajas (más de 59 millones de tarros).
“Queremos seguir siendo seguridad alimentaria para Chile, pilar de trabajo y empleo irremplazable en los territorios donde operamos y mostrar la responsabilidad y compromiso con la sostenibilidad de nuestras empresas socias en beneficio del patrimonio pesquero nacional”, expresó la dirigenta gremial.
Finalmente, a juicio de la Asipes, es fundamental que la Subpesca avance en la determinación de los Puntos Biológicos de Referencia (PBR) de las 17 pesquerías de las que aún se desconoce su estado de conservación real y en generar investigación complementaria para tener certezas respecto del real estado de situación de las 4 pesquerías que no cuentan con un estado actualizado, ya sea porque se encuentran en veda extractiva o porque no hay actividad dirigida como pesca objetivo.
Además, agregaron, es urgente implementar planes de recuperación para aquellas pesquerías que se encuentran en estado de agotamiento y sobreexplotación. “La investigación es fundamental para reducir la incertidumbre y tomar mejores decisiones para la administración pesquera. Por ello, resulta determinante que el Instituto de Fomento Pesquero cuente con los recursos económicos necesarios para poder ejecutar su trabajo”, precisó el gremio.
Análisis por pesquería
- El Jurel: Es la principal pesquería industrial de la zona centro sur, que cuenta con certificación internacional de sostenibilidad (MSC) y sigue mostrando una recuperación continua, lo que reafirma la adecuada gestión que se ha realizado en los últimos años. Gracias a esto, esta pesquería tuvo un incremento histórico de su cuota de captura en el Pacífico Sur, al pasar de 581.074 toneladas en 2022, a 716.758 toneladas en 2023. Esto es el resultado de las positivas cifras asociadas al estatus del stock y la biomasa desovante que dan cuenta de su estado actual de plena explotación.
- Merluza común: Lamentablemente, la tradicional “pescada” sigue encontrándose en estado de sobreexplotación, pero continúa mostrando leves signos de recuperación. Los objetivos de manejo no han sido suficientes para lograr la recuperación de este recurso, debido al alto nivel de pesca ilegal al que está sometido, principalmente por la pesca artesanal de la región del Maule.
- Sardina común: Se destaca la recuperación de este recurso que alcanza nuevamente estado de plena explotación. Éste es uno de los recursos más importantes para la pesca artesanal del Biobío y es procesado en un 100% en las plantas de la pesca industrial.
- Camarón Nailon y Langostino Amarillo: Estas pesquerías que se capturan entre las regiones de Valparaíso al Biobío se encuentran en estado de subexplotación, lo que indica que actualmente su biomasa es mayor al rendimiento máximo sostenible. Estas dos pesquerías se encuentran certificadas por la MSC desde 2017, dando cuenta del trabajo sostenido de la industria por realizar capturas bajo estándares sustentables.
