Ingrese sus palabras clave de búsqueda y presione Entrar.

“No hay ninguna restricción para hacer contacto directo con proveedores en China”

  • Experto en este negocio explicó los pasos y razones para importar desde Asia.

 

Muchos emprendedores chilenos comenzaron fabricando sus propias cosas para vender, pero con el paso del tiempo se han dado cuenta que es más conveniente importar desde Asia.

Eso es algo que captó Enrique de Petris, co-fundador de Azimuthzero, firma que ayuda a los empresarios a acelerar el proceso de importación. Por eso afirmó que en general es más rentable importar de Asia que fabricar en el país, pero depende de muchos factores. 

“El más directo, que no solo tiene que ver con Asia, sino con cualquier país de origen, es la eficiencia logística, que corresponde a cuanto impacta todos los gastos sobre el costo del producto. Algunos productos que son muy ineficientes de transportar tienen esta barrera natural que protege la manufactura local (ejemplos, podrían ser los frascos, bidones o botellas plásticas). Otro factor general tiene que ver con la apertura del comercio entre países, que se traduce en tratados de libre comercio, que rebajan o eliminan la carga arancelaria entre países. Dado que Chile tiene estos tratados firmados con muchos países de Asia, esto rebaja la barrera de entrada haciendo más conveniente importar”, explicó.

Agregó que más particular a Asia, obviamente un factor a considerar es el costo de la mano de obra dado que varios países de ese continente tienen bastante menores que los de Chile. Si es relevante considerar que este factor no se considera por sí solo, sino en cómo impacta en cada producto por lo que lo relevante es entender en la contribución de la mano de obra en la estructura de costo de cada producto. De esta forma, un producto intensivo en mano de obra (por ejemplo, muebles, cerámica, juguetes) tendrá más ventajas que un producto con menor impacto (por ejemplo, barras de acero).

Se debe considerar, dijo, algunos factores más específicos como restricciones o subvenciones a ciertas industrias tanto en los países de origen como en Chile, que pueden alterar la competitividad de ciertas categorías, más allá de los factores que se resumen arriba. Otro punto no menor tiene que ver con la oferta de proveedores, dado que habrá productos para los cuales en Chile se pueden encontrar 5 a 10 proveedores, mientras en China habrá entre 500 y 1.000, por lo que es factible acceder a mejores precios y oferta, a pesar de que los puntos conceptuales explicados arriba tiendan a favorecer la producción en Chile   

-Con todo lo anterior, ¿China es el favorito?

-En general, es la primera opción en la gran mayoría de los productos manufacturados, porque tiende a reunir casi todas las características mencionadas antes.  Muy abierto al mundo, con tratados de libre comercio con determinados países. Mucha oferta de fletes marítimos, que ayudan la eficiencia en tarifas. Un costo de mano de obra bastante bajo, a pesar de que ha subido sostenidamente en la medida que China se ha transformado en la “fábrica del mundo”. También se da una planificación central del gobierno, muy pro industria, que lleva 30 años incentivando la creación de empresas manufactureras y la concentración de polos industriales especializados, lo que incentiva la productividad y eficiencia

– ¿Cómo un emprendedor puede hacer contacto con un proveedor asiático? ¿Cómo confiar?

– No hay ninguna restricción para empresas chilenas, de ningún tamaño, para hacer contacto directo con proveedores en China. Cada vez hay más plataformas como Alibaba, que permiten buscar proveedores por rubro o producto. Incluso muchas de estas ofrecen sistemas de evaluación o puntuación, para tener una idea más completa de que tan confiable es el proveedor contactado Además, una cantidad importante de los proveedores en China tiene como foco la exportación, por lo que reúne las competencias básicas para ser contactado desde afuera y empezar una relación comercial. Respecto de si se puede confiar en estos, si sigue habiendo una cuota importante de dado la gran cantidad de proveedores y los diversos niveles de desarrollo que tienen. Sin duda que hay una cantidad de proveedores, que directamente no son confiables, pero están lejos de ser la mayoría. El mayor riesgo son la gran cantidad de proveedores que no tienen las competencias adecuadas para cumplir al nivel que uno espera y necesita. Es recomendable apoyarse en empresas certificadoras en origen, para auditar a los proveedores potenciales, antes de iniciar una relación comercial, para saber con quién se está trabajando, dimensionando adecuadamente si tiene expertise, escala y competencias adecuadas.

– ¿Es sencillo aprender ese proceso de importación? ¿Cómo se puede hacer?

-No es un proceso extremadamente complejo, pero tampoco es sencillo. Tiene infinidad de detalles que aumentan la posibilidad de equivocación y cada error tiene costos asociados, ya sea directamente monetarios o que se traducen en atrasos. Dado esto, es importante capacitarse correctamente o asesorarse en empresas especializadas en la materia. 

-Un tema es la llegada de productos en cuanto a los tiempos ¿Eso se ha ido acortando?

-La pandemia generó un cuello de botella importante, dada la brusca desaceleración, cuando se empezaron a producir cuarentenas masivas a nivel mundial, con una posterior aceleración violenta. Esto generó escasez de naves, lo que hizo aumentar los tiempos de tránsito, ya sea por atrasos en origen (falta de ) o aumento de recaladas. Esto se ha ido normalizando, a medida que se retoma la normalidad post-pandemia, pero no ha llegado a los niveles previos al 2020. Hoy el tránsito promedio está en torno a los 40-45 días, siendo que 3 años atrás era más cercano a los 35 días

– Sobre los impuestos ¿Cómo se maneja eso en Chile?

-El tema de impuestos hay que verlo en dos dimensiones. La primera es saber, al momento de tomar la decisión de compra, que impuestos aplican a la importación del producto en cuestión. De esta forma se evitan pagos no planificados al internar la carga, que pueden dañar seriamente el margen esperado de la operación. La segunda es la parte operativa, que se ejecuta cuando llega la carga a Chile, donde el pago oportuno de los impuestos es una parte clave, dado que no hacerlo implicas costos adicionales y multas. Para ejecutar este proceso se debe contar con el apoyo de un agente de , el cual es obligatorio para cualquier carga con valor superior a los US$1.000. Este apoya al importador con la gestión y pagos de todo lo relacionado con la carga, desde que llega la nave hasta que deja el puerto. Sin duda que la correcta selección del agente de aduanas es clave para el éxito del proceso de importación

– ¿Cómo puede asegurar un importador que las cosas que traiga son de calidad?

-Un punto clave para asegurar que los productos importados son de calidad es, precisamente, saber especificar de la mejor forma que se entiende por calidad. Alejarse de la percepción y la subjetividad para llevar la calidad esperada a parámetros lo más concretos y medibles posibles. Cualquier aspecto que no quede bien definido, se presta para que el proveedor lo interprete a su parecer, el cual usualmente será moverse hacia la opción de menor costo. Es importante apoyarse en empresas especializadas que pueden ejecutar inspecciones en origen, siguiendo lo definido en el punto como guía. Para esto, existen múltiples alternativas, desde multinacionales dedicadas a la certificación de carga a empresas más especializadas en dar servicios de control y aseguramiento de calidad, más a la medida de cada cliente.