• Reporte de CBC da cuenta que para el quinquenio 2022-2026, el gasto supera los US$3.650 millones en 76 iniciativas.
El catastro de proyectos con cronograma definido por la nueva actualización del Informe Trimestral de la Corporación de Bienes de Capital (CBC) sobre la inversión a materializar para el quinquenio 2022-2026, contempla, al 31 de marzo de 2022, un stock de 943 iniciativas privadas y estatales.
En base a ello, la inversión a materializar durante el lapso 2022-2026, ascendería a US$ 53.776 MM, donde un 65,4% corresponde a financiamiento privado y un 34,6% es estatal. De ese monto total, La Región del Biobío muestra una inversión de US$3.656 millones en 76 iniciativas, que se dividen en Energía US$1.113,4 millones; Forestal US$133,8 millones; Industrial US$16,7 millones; Inmobiliario US$477,5 millones y Obras Públicas con US$1.914,6 millones.
En cuanto a comunas, las que se llevan las mayores inversiones son Concepción con US$645 millones, Coronel US$230 millones y Negrete con US$145 millones.
Buena palanca
Ante este panorama, Orlando Castillo, gerente general de CBC, afirmó que, si bien la Región del Biobío tiene la quinta posición en inversión regional, superada por la Metropolitana y las regiones Tarapacá, Antofagasta y Atacama que son muy intensivas en inversión minera, se encuentra en segundo lugar de inversión a nivel nacional en los sectores de Energía, Obras Públicas e Inmobiliario, lo que constituye una buena palanca para el desarrollo futuro de la región.
Agregó que los proyectos de obras públicas son en general habilitantes para el desarrollo del territorio y pueden ir apalancando otro tipo de inversiones y en otros sectores. “En el caso de energía se ha ido concentrando un buen volumen de proyectos por buenas condiciones de entorno y eso podría implicar nuevas iniciativas en el futuro”, sostuvo.
Sobre si el sector forestal, dejando fuera a Mapa, se estancó en inversiones, el ejecutivo indicó que es difícil hablar de estancamiento después del potente gasto del grupo Arauco, que corresponde a un megaproyecto y que es muy poco probable que se dé uno equivalente en el corto plazo, pero sí se podrían dar proyectos de menor envergadura y de manera especial los denominados de inversión operacional, que permiten dar continuidad y/o optimizar las capacidades actuales.
Mientras que Rody Toro Picarte, director de Ingeniería Civil de la Universidad San Sebastián, coincidió en que no es una mala cifra, ya que al “compararnos a nivel país, la región se encuentra en el sexto lugar después de la Región Metropolitana, Antofagasta, Atacama y Tarapacá (estas tres últimas fuertemente influenciadas por la inversión en minería), también detrás de las inversiones interregionales. Hay que considerar, además, que la región registra un crecimiento a pesar de que ya no está influenciada por el proyecto Mapa, que a pesar de que aún no sale del análisis, las inversiones son de US$133 millones”.
Sumó que las obras públicas, que mayormente tienen gasto privado, siempre han sido relevantes e importantes en cuanto a inversiones en la región. Desde hace unos años, también entró fuertemente y, por lo tanto, ha sido muy incidente el sector Energía, de hecho, hoy, en el análisis de la CBC, el 52% de las inversiones de la región, es representada por OOPP, y el 30% por el sector Energía, y entre ambos representan alrededor del 82% de las inversiones en la región.
Pilar
A su vez, Jaime Vera, académico de Ingeniería Comercial de la Universidad Andrés Bello, estimó que la inversión es uno de los pilares fundamentales para el crecimiento económico explicando más del 25% del producto interno bruto del país y generando efectos positivos en el empleo e ingresos de las personas y en el desarrollo y prosperidad de una economía. La inversión conecta la economía real y los mercados financieros y promueve un entorno de mayor bienestar y oportunidades.
“Sin embargo, la estimación de la inversión para la Región del Biobío en el periodo 2022-2026 se encuentra en el 6° lugar a nivel nacional, considerando proyectos privados y estatales, con un monto aproximado de US$3.656 millones (78,4% privado y 21,6% estatal). La composición de esta inversión por sector industrial, en orden de magnitud, está liderada por proyectos de obras públicas, energía, inmobiliario, forestal e industrial. Del total estimado se espera que el 30% se materialice este año y un 27% el próximo, lo cual evidencia una caída importante a partir del año 2024. Lo anterior se debe a que gran parte de estos proyectos se encuentran en etapa de ingeniería de detalle y construcción”, detalló.
Añadió que centrando el análisis en los proyectos de energía y obras públicas estos representan un 82,8% de la inversión total estimada para el periodo de análisis 2022-2026, sin embargo, su mayor desarrollo se realizará dentro de este año y el próximo, por lo cual no es posible proyectar que sostengan la inversión regional en el largo plazo.