El conocimiento de cómo a las personas les gusta vivir, pasar el tiempo y relacionarse con el mundo es cada día más importante a la hora diseñar y adaptar los nuevos proyectos residenciales.
Entender y adaptar la demanda es la máxima en el éxito de cualquier negocio, incluido el inmobiliario. Si los millennials impulsaron diversas innovaciones en el mercado debido a que son el segmento que más está comprando, arrendando e invirtiendo en propiedades, el escenario económico y social postpademia está revelando nuevas capas o perfiles que están asociados al lifestyle de cada cliente, más allá de la etapa específica de la vida que están atravesando.
“Hoy es más importante que nunca conocer las motivaciones y valores de los clientes para ofrecer un producto cada vez más personalizado y a la medida”, explicó Isabel Letelier, subgerente de Operaciones y Venta en Inmobiliaria Insta, quien estimó que existen 4 nuevos perfiles que están empezando a marcar tendencia en el mercado inmobiliario chileno.
Uno de ellos son los dnks, que en inglés significa “Double Income no kids” (doble sueldo sin hijos). “Son parejas que deciden no tener hijos o posponen esta decisión. Cuentan con estudios medios o altos y ambos trabajan. Su objetivo es disfrutar experiencias que enriquezcan su vida, como acceder a viajes, restaurantes, artículos tecnológicos, pasatiempos, la práctica de algún deporte, entre otros”, comentó.
La ejecutiva indicó que este perfil de cliente es independiente y ambicioso “y como comparten gastos, optan principalmente por adquirir departamentos de buen metraje, porque les da la seguridad para salir los fines de semana o vacaciones, y cuentan con el espacio para suficiente para trabajar, disfrutar su hobbie y llevar a cabo su lado más social o sibarita, ojalá en una terraza o rooftop con buena vista”.
Los otros son los nómadas románticos, aquel grupo que está realizando grandes cambios en busca del equilibrio entre su vida profesional y personal, porque emprendieron o tienen la posibilidad de teletrabajar. “En general, dejan los centros más céntricos o urbanos donde siempre han vivido y migran a comunas o ciudades que ofrecen una mejor calidad de vida, donde puedan caminar por el vecindario y tener sentido de comunidad, donde formar y criar familia”, señaló Isabel Letelier, quien mencionó que son personas que preocupan mucho de lo que consumen y compran, prefiriendo aquellos productos que sean amigables con el medioambiente, incluidos la casa o departamento que elige habitar.
También están los BoBos que, en inglés, significa Bourgeois Bohemian (burgués bohemio). Son profesionales con altos sueldos, cultos, intelectuales y con un buen sentido estético, con gustos bohemios muy marcados. “En materia inmobiliaria, los BoBos eligen departamentos en barrios tradicionales, en proyectos reconvertidos, de tipo boutique o baja densidad, que tengan un estilo marcado. Privilegian sectores con una oferta interesante en materia gastronómica, cultural y comercial”, afirmó la experta la ejecutiva .
Finalmente, están las mujeres alfa, quienes tienen buenos trabajos y sueldos, generalmente asumen roles tradicionalmente ligados a los hombres, priorizan su carrera profesional y, en muchas ocasiones, son jefas de hogar. “Son mujeres independientes y empoderadas en cuanto a sus finanzas y su futuro, por lo que son más arriesgadas a la hora de tomar decisiones importantes, como comprar su primera propiedad antes de los 30 años o invertir en uno o más departamentos con el fin de generar mayores ganancias y proveer estabilidad a su vida y a la de sus seres queridos, lo que no necesariamente significa que tengan pareja o hijos, ya que la realización de la Mujer Alfa está en su propio crecimiento”, finalizó Isabel Letelier.