Constanza Escobar Cárdenas
Directora de Administración Pública Universidad San Sebastián
Quedan pocas horas para el cambio de mando, instancia histórica en nuestro país. Sin duda, esta vez nos enfrentamos a un traspaso del poder diferente, no solo por las restricciones impuestas a causa de la pandemia, sino también porque asume el presidente más joven en la historia de Chile, con un congreso renovado, con un proceso constituyente en camino y con una fuerte división política. Vivimos desde hace un tiempo un contexto marcado por la polarización, donde los temas relativos a seguridad, migración y equidad han dominado la agenda.
En este escenario, son muchos los desafíos que deberá asumir el nuevo gobierno. Deberá abordar, con la futura oposición, un sinnúmero de promesas, propuestas e iniciativas y, por supuesto, las prioridades que la misma contingencia social levantará.
Para lograr el bien común, generar políticas públicas consistentes, que perduren en el tiempo y que aporten al bienestar de la sociedad, es fundamental construir puntos de convergencia. Hoy más que nunca se requiere de unidad y es relevante que, en este clima tenso, el diálogo y los acuerdos reinen y se conviertan en la clave para alcanzar el éxito de un gobierno que debe propiciar el bien de todos los ciudadanos sin distinciones.
