En febrero de 2022, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) anotó un incremento mensual de 0,3%, una variación acumulada de 1,5% en lo que va del año y un alza a doce meses de 7,8%, de acuerdo a lo informado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Diez de las doce divisiones que conforman la canasta del IPC aportaron incidencias positivas en la variación mensual del índice y dos presentaron incidencias negativas.
Entre las divisiones con aumentos en sus precios destacó alimentos y bebidas no alcohólicas que anotó aumentos mensuales en nueve de sus once clases (1,8%). De los 76 productos que componen la división, 59 presentaron alzas en sus precios, siendo el más relevante pan (3,2%), seguido de carne de vacuno (2,8%) y vivienda y servicios básicos (0,9%). Entre las divisiones que consignaron bajas mensuales en sus precios destacó recreación y cultura (-5,2%)
Al respecto, el economista de la UdeC, Claudio Parés, explicó que si bien la medición de inflación muestra una cifra alentadora de 0,3%, la situación sigue siendo delicada. “Y es que la variación del índice del último mes compensa alzas importante en alimentación, vivienda y servicios básicos con bajas significativas en recreación y cultura, por lo que el impacto de esta alza moderada «en el promedio» será muy distinta para sectores distintos de la población”.
Lo otro que es necesario considerar, dice Parés, es que la situación internacional implica que las tasas de interés y algunos precios internacionales seguirán siendo relativamente altos, por lo que las políticas monetarias restrictivas deberían seguir en pie. “Esto significa que debemos acostumbrarnos al ajuste moderado en la actividad económica y tener paciencia para recuperar la estabilidad de precios a la que estábamos acostumbrados”.
“Necesitamos mantener un ojo puesto en la productividad y paciencia para producir cada vez más y mejor para todos”.
El presidente de la CPC Biobío, Álvaro Ananías, agregó que “si bien este mes el IPC nos sorprendió con un alza menor a lo que se esperaba, lo cual es una buena noticia, no podemos anticiparnos aún a proyectar el año 2022 completo. Sin embargo, esperamos que la inflación tienda a estabilizarse con valores inferiores a los que tuvimos el año pasado”.
“Observamos que este aumento de un 0,3% como un momentáneo alivio al bolsillo y al bienestar de las familias de la región, que durante el año pasado se vieron afectadas por una inflación que superó las expectativas y que nos mantiene en alerta permanente»*.
Para los expertos de Inversiones Security precisaron que, si bien la cifra del IPC de febrero podría reflejar una moderación de las presiones inflacionarias, el resultado más bajo respondió a dos productos (paquete turístico y pasaje aéreo), mientras que en el resto se sigue observando aumentos generalizados de precios.
Además, hay que considerar que el panorama inflacionario ha cambiado mucho en el último mes, con alzas significativas en las materias primas (alimentos y combustibles) que seguirían presionando la inflación al menos durante la primera mitad del año. Así, la variación interanual del IPC se acercará a 9% durante el primer semestre del año para comenzar a converger al techo del rango recién hacia 2023.
En este escenario, el Banco Central realizaría un nuevo incremento a la TPM, esta vez de 200pb, situándola en 7,5% en la reunión de marzo, y otros 100pb en mayo hasta 8,5%, para lograr reencauzar las expectativas de inflación a dos años plazo, hoy cerca de 5%.